Solo el MIHL, O Vello Cárcere y los centros de la Muralla y del Camino abrieron ayer a los turistas
14 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Lugo carece de un museo de la romanización acordado por la Xunta con el Concello en el cuartel de San Fernando, pero en días como el de ayer, la ciudad también cerró buena parte del fondo de armario romano que posee para mostrar a los lucenses y a los visitantes. Las cuatro salas de interpretación romana municipales (Mitreo, Mosaicos, San Roque y Porta Miñá) solo abren de jueves a domingo. Pero fue también significativo el cierre de los únicos dos centros con categoría de museos que tiene la ciudad y que atesoran piezas de Lucus Augusti: el Provincial, que depende de la Diputación, y el Diocesano, del Obispado.
De tal manera, que un turista o un lucense que ayer, Martes de Entroido, quisiese ver algo relacionado con el pasado romano de la ciudad debería acudir al Centro de Interpretación da Muralla, que hace a la vez de oficina de turismo, o acercarse hasta Frigsa y ver la pequeña sala dedicada al Lugo romano que tiene el MIHL. También había dos espacios culturales abiertos y que albergan algún tesoro imperial: el Centro de Interpretación del Camino de Santiago en Lugo, que depende de la Xunta; y O Vello Cárcere.
Todo lo demás relacionado con el pasado romano lucense, que no es poco, estaba cerrado al público, o bien porque era día laborable, o por falta de recursos de las administraciones: los restos de la basílica del foro romano del Centro de Novas Tecnoloxías, los restos de la calzada romana que se pueden ver en el Pazo de la Maza, los restos de los mosaicos en el interior de zapaterías de Doutor Castro, los 19 metros de pasadizo entre el párking de Santo Domingo y la Praza de Abastos donde se conserva un muro de una construcción romana, musealizado in situ, los restos de casas romanas en los número 12 y 14 de A Tinería (donde está la Oficina de Turismo da Xunta), los restos in situ en un patio del Colexio Oficial de Arquitectos y los restos del templo romano en el Círculo de las Artes. Y fuera del casco urbano, ayer también estuvieron cerradas Santa Eulalia de Bóveda y las termas romanas del Balneario. Eso sí, la Muralla estuvo abierta.
El Concello señala que la no aprobación del presupuesto impide que se amplíe el horario de las salas romanas
El Concello de Lugo está pendiente de la aprobación definitiva del presupuesto municipal para poder sacar de nuevo a concurso la gestión de las salas de interpretación romana, que en la actualidad solo abren de jueves a domingo, y este día solo por las mañana. El gobierno local licitó en el 2016 el servicio turístico de la Casa dos Mosaicos, el Centro Arqueolóxico de San Roque, la Domus do Mitreo y la Sala de Exposicións Porta Miñá, además de otros espacios que sí abren con más frecuencias (MIHL, Centro Interpretación da Muralla) pero finalmente quedó desierto el concurso al no presentarse ninguna empresa.
El Concello, según fuentes del gobierno local, tuvo que encargar la redacción de unas nuevas bases y reformular las condiciones económicas para que se presenten las empresas, pero las mismas fuentes apunta que al no aprobarse los presupuestos municipales no pueden licitar el contrato de las salas romanas.
El presupuesto del 2018 está aprobado inicialmente desde finales de enero, después de que la alcaldesa lo vinculase a una cuestión de confianza que desembocó en un período de 30 días para que la oposición presentase una moción de censura. Ahora está abierto un período de alegaciones como paso previo a la aprobación definitiva. Desde el gobierno local prevén que los sindicatos presenten alegaciones por la RPT, con lo que debería ser el pleno el que lo aprobase.
Una vez que estén aprobadas las cuentas, el Concello sacará a concurso los citados servicios turísticos. El gobierno local quiere que abran de martes a domingos, con horarios diferenciados de verano e invierno, y con refuerzos en períodos de vacaciones. Con el pliego de condiciones abrirían un 75% más que en la actualidad.