El Celta Fortuna, rival del Lugo este domingo, es invencible cuando juega en Balaídos, donde sumó 21 de 27 puntos posibles y solo encajó seis goles
24 ene 2025 . Actualizado a las 18:43 h.Lejos de generarle presión, la majestuosidad del estadio de Balaídos inyecta motivación y más desparpajo, si cabe, a la imberbe plantilla del Celta Fortuna, el rival del Lugo en la nueva jornada en el grupo 1 de Primera Federación (este domingo, 18 horas, TVG2). Cuando actúa entre las paredes del santuario céltico, el filial celeste es invencible. Las seis victorias y los tres empates cosechados confirman que Toni Seligrat vaya a debutar como entrenador albivermello en un búnker.
Tres partidos necesitó el conjunto gobernado por Fredi para a cogerle el gusto a desplegarse sobre el tapete de Balaídos. Tras los empates ante el Barakaldo (2-2), el Arenteiro (0-0) y el Unionistas (0-0) en sus primeras citas como local, el Celta Fortuna se comportaría como una apisonadora en sus siguientes compromisos en el hogar del primer equipo. 18 puntos de 18 posibles, con 15 goles a favor y tan solo cuatro en contra. Es el balance de sus seis últimos partidos en casa, que disputó ante la Real Sociedad B (2-1), el Andorra (3-0), el Zamora (2-0), el Ourense (1-0), la Gimástica Segoviana (4-1) y el Amorebieta (3-1).
El Celta Fortuna solo disputó un partido como local en Barreiro en la presente temporada. Fue en la decimotercera jornada del campeonato, coincidiendo con la visita de la Cultural Leonesa. El motivo fue que estaba programado para esa fecha, aprovechando el parón en Primera División, un tratamiento especial del césped del estadio de Balaídos necesario de cara al invierno.
Hacía nueve meses que el filial no competía en Barreiro. La pasada campaña solo lo hizo puntualmente. La última vez, de hecho, databa del mes de febrero, cuando recibieron al Sestao, todavía con Claudio Giráldez al frente. El porriñés, como sus jugadores, había expresado en múltiples ocasiones que su preferencia era jugar en el campo del primer equipo, al igual que el actual entrenador, Fredi Álvarez.
El traslado no sentó bien a las promesas célticas, que perdieron por 1-3 ante una Cultural Leonesa que entonces ya dominaba el grupo con mano de hierro. Luis Chacón adelantó a los visitantes ya en el minuto 5 del encuentro, Gael Alonso empataría a poco de comenzar el segundo período, y ya en la recta final, un doblete del exalbivermello Antón Escobar dio la victoria al equipo dirigido por Raúl Llona.
«Es un equipo rápido, atrevido y con un juego vertical»
Tan solo 24 horas después de su presentación como nuevo entrenador del Club Deportivo Lugo, Toni Seligrat volvió a la sala de prensa del Ángel Carro para analizar el derbi ante el Celta Fortuna. El flamante preparador albivermello reconoce la enorme capacidad del rival y solo tiene palabras de elogio para su juego, si bien precisa que la condición de filial también podría hacerlo más vulnerable. «Estamos hablando de un filial de un equipo de Primera División, que además está con mucha confianza. Un equipo rápido, atrevido y con un juego muy vertical. Como aspecto negativo, los equipos filiales suelen ser irregulares, veremos qué versión nos encontraremos del Celta Fortuna este domingo», razonó.
La escuadra lucense afrontará este encuentro después de solo cuatro sesiones —contando con la de este sábado— del nuevo preparador, que indicó que la preparación se ha llevado a cabo en «modo bólido». «Todo ha sucedido rápido, deprisa, pero he tenido la gran suerte de que he encontrado un grupo de gente muy receptiva y así se hace todo mucho más fácil. El proceso de adaptación teniendo que competir es difícil, pero así se dan las cosas en este tipo de situaciones», señaló Toni Seligrat, quien podría tener que lamentar más bajas que las de los lesionados Bernardo Cruz y Marcos Sánchez. «Tenemos alguna duda, pero todavía no puedo confirmar nada», dijo.
«En estas primeras sesiones he buscado transmitir conceptos que son importantes para mí, para que ellos los puedan ir interiorizando. No puedes cambiar muchas cosas, y los cambios que se hacen son cosas sencillas. De lo sencillo a lo complicado hay que ir progresivamente», añadió Toni Seligrat antes de insistir en las virtudes de su plantilla: «Aquí me he encontrado un grupo una gran calidad humana, con un nivel de cohesión y de relación personal entre ellos que es extraordinario, lo que facilita todo un poco».