
Sobre el ghanés, que marcó tres goles en las dos últimas citas, recaen casi todas las esperanzas de un club que se juega su futuro deportivo e institucional en la última jornada
23 may 2025 . Actualizado a las 17:08 h.22 años y una semana después, el Club Deportivo Lugo vuelve a mirar con pánico a la cuarta división del fútbol sala español. Llega a la última jornada de Primera Federación en riesgo de caer a un precipicio que no pudo esquivar en la despedida del curso 2002/2003, cuando el naufragio en la desaparecida Segunda División B lo hundía en el abismo de Tercera División. A diferencia de entonces, en esta ocasión los albivermellos no tienen que esperar favores. La victoria en el campo del Amorebieta los sostiene en la categoría de bronce (sábado, 19 horas, TVG2).
Con su futuro institucional también en juego —la venta del club se abortaría en caso de descenso—, el conjunto lucense aún conservaría opciones de permanencia en los peores de los escenarios. Con el empate también se mantendría fuera de los puestos de descenso si no ganan tres de los cuatro equipos que le suceden en la clasificación: Unionistas, Sestao River, Osasuna Promesas y Real Unión. En caso de derrota, la carambola es similar y lo salvarían dos de estas cuatro posibilidades: la derrota del Unionistas en el campo del Barcelona B y que pierdan o empaten el Sestao River, el Osasuna Promesas y el Real Unión.
En su agónica lucha, las huestes de Álex Ortiz se encontrarán al otro lado del campo de batalla de Urritxe a un Amorebieta ya sin opciones de permanencia, pero que ha ganado los dos partidos disputados después de decir adiós a la categoría. Se impuso por 4-3 al Celta Fortuna y por 0-3 al Ourense CF, un par resultados que no entraban en ningún pronóstico y que han puesto en alerta a los guerreros del Ángel Carro. «Los equipos que ya no se juegan nada son los más peligrosos», coincidieron en señalar varios futbolistas rojiblancos a lo largo de una última semana en la que también abundaron los mensajes de responsabilidad. «Hay que demostrar que el Lugo se juega la vida», arengó Juan Rodríguez, el último en pasar por la sala de prensa del Ángel Carro antes del míster.
Con Jon Cabo y Guille Perero lesionados, y Bryan Mendoza y Nico Reniero sancionados, prácticamente todas las esperanzas de la gran familia albivermella están depositadas en Jerry Afriyie, el sostén ofensivo del equipo en los partidos anteriores. El delantero ghanés cedido por el Al-Qadsiah FC saudí, donde tiene contrato hasta el 30 de junio del 2028, ha sumado tres goles en los dos últimos compromisos. Hizo un doblete decisivo para consumar el puntazo en el campo del Nàstic de Tarragona (2-2) y abrochó el trascendente triunfo de hace una semana frente al Zamora (2-0). «Es un atleta que juega al fútbol», destacó su técnico después de ese último compromiso, asombrado por el despliegue físico del ariete africano.
Incorporado como refuerzo en el mercado invernal, aunque su llegada a Lugo se demoró hasta mediados de febrero, Jerry acumula cuatro tantos y dos asistencias en los nueve partidos que ha disputado como albivermello, siete de ellos como titular.
Álex Ortiz: «Es un plus saber que dependes de ti mismo»
El Lugo puso rumbo a Amorebieta a primera hora de este viernes con una expedición de la que forman parte tres futbolistas del filial: Pablo Rubal, Hugo Padín y Cidre. Antes de emprender viaje, su técnico pasó por la sala de prensa del Ángel Carro para analizar el decisivo partido en Urritxe. Entre sus reflexiones, la tranquilidad que genera no depender de terceros y la peligrosidad del adversario pese a estar ya descendido. ««Sabemos que vamos a un campo muy complicado y jugamos ante un rival que en los últimos partidos ha alcanzado un nivel alto y ha logrado buenos resultados, pero es un plus saber que dependes de ti mismo», declaró Álex Ortiz.
El Lugo acude al compromiso con la necesidad de ganar, y su preparador está convencido de que el equipo alcanzará el nivel de motivación necesario para conseguirlo. «Es una plantilla que desde el primer día ha estado muy comprometida y ha sido muy trabajadora, desde los que juegan más a los que juegan menos. No hay relajación por parte de nadie, todos están muy comprometidos y hay un clima muy bueno en la plantilla. Tenemos el mayor compromiso por hacer las cosas bien y estoy muy tranquilo por cómo han afrontado esta última semana», subrayó.
«Vamos a tener que hacer muchas cosas bien y controlarlo todo, además del balón parado. Ellos transitan muy bien, tienen gente que al espacio hace mucho daño y un mediapunta entre líneas que sale muy rápido a la contra», añadió Ortiz, quien, en principio, introducirá al menos dos cambios en la alineación, Erik Ruiz y Dani Vidal.