Tratamientos con ácido hialurónico: ¿cómo se inyecta?, ¿es doloroso?, ¿cuánto tiempo dura su efecto?

Eliminar o atenuar arrugas, disimular cicatrices, aumentar el volumen de los labios o redondear zonas como pómulos, mejillas o mentón. Detrás de todas estas posibles aplicaciones se encuentra el ácido hialurónico, uno de los tratamientos de medicina estética más demandados de nuestro país. «Se trata de una molécula biocompatible y reabsorbible, totalmente compatible con el cuerpo. Su duración es de alrededor de 6 a 15 meses, dependiendo de la marca y la reticulación de este», explica Kalena Hwang, doctora en medicina estética en la Clínica Niuno Wellness Life. 

¿Qué aplicaciones tiene el ácido hialurónico?

Las infiltraciones o rellenos de ácido hialurónico contribuyen a atenuar casi todo tipo de cambios faciales que se producen en nuestro rostro con el paso del tiempo. «Se puede utilizar de muchas maneras, dependiendo de las necesidades del paciente», apunta Hwang. Así, está indicado para el tratamiento de depresiones cutáneas, arrugas, surcos y cicatrices. Al igual que permite la remodelación de ciertas zonas faciales, como el aumento de pómulos, mentón o labios. 

¿Qué diferentes tipos de ácido hialurónico existen?

Dependiendo de las necesidades del tratamiento, se pueden utilizar diferentes tipos de hialurónico. «Se puede optar por uno de menos densidad para arrugas finas o hidrataciones de labios, porque hay ácidos que no aportan volumen, simplemente rejuvenecen», indica la especialista de la Clínica Niuno Wellness Life. 

«En cambio, si necesitamos algo más de densidad para una arruga más profunda, se puede utilizar otro tipo más denso como el que se utiliza en pómulos, para poder proyectar. También hay uno especial para ojeras, que tiene como indicación solo esa zona, porque cuenta con unas propiedades que no aportan volumen», añade. 

¿Cómo se realiza su aplicación? 

No se trata de un proceso especialmente doloroso. Con todo, la doctora remarca que depende de la zona y que, a veces, es necesario recurrir a anestesia: «Por ejemplo, en el labio, siempre molesta. Es mucosa y siempre necesitamos una crema anestésica, que suele tardar quince minutos en hacer efecto. Hay personas que a los cinco minutos tienen los labios muy anestesiados, pero otras que necesitan un bloqueo anestésico de los labios, como los que llevan a cabo los odontólogos». 

Por otra banda, existen otras áreas del rostro, como los pómulos, «en las que la infiltración del ácido no molesta y más si se hace con una microcánula (una especie de aguja que se utiliza en medicina estética, que tiene la punta roma y es flexible), ya que la microcánula va por debajo de la piel y no debería molestar». 

La intervención suele durar entre quince minutos a una hora, dependiendo de la cantidad a aplicar y la zona.

¿Cuáles son los cuidados posteriores?

La persona puede llevar a cabo una vida completamente normal después del tratamiento. La doctora explica que, al igual que el proceso de intervención puede ser más molesto en los labios, esa zona también es la que puede dar más complicaciones a posteriori. «Puede inflamarse un poco o sentir un poco de dolor en la palpación. Pero suele desaparecer a los dos días», indica la doctora.

También puede desencadenar un hematoma en el área tratada: «Siempre existe ese riesgo porque se trabaja con agujas para el procedimiento. Con todo, puede que ni aparezca si se trabaja con microcánulas». 

Con todo, ante cualquier signo de alarma, el paciente debe informar al especialista. Además, en el caso de sufrir dolor, Hwang aconseja aliviarlo con la toma de algún analgésico. 

¿Cuándo serán visibles los resultados?

El efecto del tratamiento es perceptible inmediatamente. «Pero el resultado final se aprecia después de haber pasado el mes del tratamiento. Más o menos, es lo que necesita el hialurónico, para captar agua e integrarse al tejido. Ahí el paciente se verá mucho mejor», añade.  

¿Qué diferencia existe entre el ácido hialurónico y los neuromoduladores?

Aunque pueden llegar a confundirse, no son lo mismo. ¿Qué es la neuromodulacion facial? La doctora responde que «se trata de un tratamiento de medicina estética facial con el que relajamos la musculatura facial, suavizando la arrugas existentes y previniendo la formación de nuevas». Por eso, a la hora de hablar de diferencias entre ambos, «el ácido hialurónico tiene un efecto hidratante, voluminizador, de relleno. Es como una especie de gel. En cambio, los neuromoduladores, son líquidos. Se encargan de relajar y paralizar la musculatura», matiza Hwang.

Ambas sustancias tienen algo en común: se degradan y se reabsorben, son temporales: «Dependerá de la persona, porque si eres fumadora, haces mucho ejercicio o no bebes suficiente agua, se va a reabsorber antes. El cuerpo busca fuentes de hidratación y el ácido hialurónico es una de ellas, ya que su mecanismo de acción es la captación de agua. De ahí su volumen». 

¿Volumen o hidratación de labios? 

Las aplicaciones de ácido hialurónico que más se demandan en la Clínica Niuno Wellness Life son en los pómulos y en los labios; tanto la hidratación como el aumento de los mismos. La diferencia entre los últimos dos tratamientos es el producto que se utiliza. Si el objetivo es buscar un efecto hidratante, «buscamos que el mecanismo de acción sea la hidratación. No cambiaría la forma del labio, simplemente se verían más hidratados, más jugosos y, si la persona nota que se le secan, eso sucederá mucho menos». 

¿Existe una edad recomendada para aplicarse ácido hialurónico?

«Depende», responde la doctora. «Si se trata de un relleno, ya sea en labios, pómulos o una rinomodelación, se recomienda que sean mayores de edad. Sin embargo, hay que recordar que existen algunos tipos de hialurónico que la gente demanda, simplemente, porque quiere conseguir una hidratación facial. De hecho, estos ya suelen estar mezclados con vitaminas», añade. 

¿Los hombres también pueden someterse a este tratamiento? 

Sí, la población masculina también puede someterse a este tipo de tratamientos de ácido hialurónico, si bien Hwang comenta que no es el que más suelen demandar ellos. «Optan más por los neuromoduladores, ya que hay muchos hombres que son muy expresivos y no buscan eliminar arrugas, solo atenuarlas un poco y mejorarlas. Dar una especie de ‘cara fresca’».