El biometano, protagonista de la descarbonización
Este tipo de gas renovable es uno de los elementos clave hacia la transición energética proyectada para los próximos años. El hidrógeno verde o la aceleración de la electrificación también forman parte de esta carrera hacia la energía limpia y renovable
La compañía energética Naturgy continúa dando pasos de gigante hacia la descarbonización. Prueba de ello es que ya cuentan con tres plantas operativas de producción propias de biometano, una en Galicia y dos en Cataluña. Además, gestionan una amplia cartera de proyectos en todo el territorio en distintas fases de desarrollo, a la que se sumarán en los próximos meses dos nuevas instalaciones de biometano en Valencia y Sevilla.
El biometano es un gas renovable obtenido a partir de desechos orgánicos -de origen agrícola, ganadero o industrial- o que proceden de vertederos o plantas de tratamientos de residuos. Para el sector energético, este proyecto es ejemplarizante en cuanto a economía circular, además de supone una fuente de ingresos complementaria para el sector rural -contribuyendo adicionalmente a la descarbonización- del sector primario y suministros cada vez más descarbonizados para el usuario final.
En el ámbito industrial, la compañía tiene dos acuerdos con grandes empresas enfocados a la descarbonización: por un lado, la papelera Lecta, con quien han firmado un acuerdo de suministro de gas renovable que facilitará la descarbonización eficiente de la actividad del grupo industrial. En este caso, el biometano será usado por los centros de producción de Lecta ubicados en Leitza (Navarra) y Zaragoza.
El segundo gran acuerdo industrial de venta de biometano por parte de Naturgy se ha firmado a principios de año con Inditex, y les permitirá cubrir el 75% del consumo de gas natural de las instalaciones del grupo textil en Arteixo y Laracha.
Para alcanzar los objetivos marcados por España en cuanto a reducción de emisiones se necesitan fórmulas que permitan descarbonizar sin perder competitividad; y los gases renovables lo permiten.
Por su parte, Nedgia, la distribuidora de gas del Grupo Naturgy, ha firmado ya 45 contratos de conexión a plantas de biometano para la inyección de gas renovable en su red de distribución de gas. La capacidad de inyección vinculada a estas solicitudes asciende a 2.400 GWh/año, equivalentes al consumo de gas de cerca de medio millón de hogares en España.
Por comunidades autónomas, Nedgia ha suscrito un total de 13 contratos de conexión en Castilla y León, 10 en Castilla-La Mancha, 8 en Cataluña, 5 en Galicia, 4 en Andalucía, 3 en Navarra y 2 en la Comunidad Valenciana. El 70% del volumen de inyección de biometano de estas solicitudes se concentra en Castilla y León (630 GWh/año), Castilla-La Mancha (586 GWh/año) y Cataluña (449 GWh/año).
La red de gas juega un papel estratégico en el despliegue de los gases renovables. Nedgia cuenta actualmente con siete instalaciones de generación de biometano conectadas a su red con una capacidad de inyección conjunta de 200 GWh/año. Además de las plantas que ya están operando e inyectando gas renovable en la red de distribución, hay 14 instalaciones más en fase de construcción o tramitación administrativa muy avanzada con una capacidad de inyección de 741 GWh/año que se conectarán a la red de Nedgia próximamente.
Que el biometano se perfile como una de las grandes soluciones para avanzar en la transición energética se debe a que, al tener cualidades similares a las del gas natural, puede distribuirse a través de la infraestructura gasista existente sin acometer grandes inversiones ya que su uso es compatible con las calderas domésticas.
«Los 45 proyectos firmados por Nedgia con distintos promotores ilustran el gran interés que hay en el mercado por el desarrollo de instalaciones de producción de gas renovable», destaca Raúl Suárez, consejero delegado de Nedgia. «Para ello son más necesarias que nunca medidas regulatorias similares a las que existen en otros países del entorno europeo».