Rodríguez-Segade: «Con ayuda médica, el proceso para dejar de fumar es más sencillo y exitoso»
La combinación de medicación y apoyo psicológico es clave para dejar el tabaco y reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, EPOC y cáncer
El tabaco es la principal causa de muerte evitable en todo el mundo, responsable de más de 8 millones de muertes al año, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Muchos fumadores quieren dejarlo, pero no consiguen superar la adicción. La clave del éxito, según el doctor Santiago Rodríguez-Segade, especialista en Neumología del Hospital San Rafael, está en combinar el tratamiento farmacológico con apoyo psicológico
—Doctor, ¿qué medicamentos hay en España para dejar de fumar?
Existen tres grandes grupos de fármacos para el tratamiento del tabaquismo. Por un lado, los agonistas parciales de los receptores nicotínicos (vareniclina y citisina), que reducen las ganas de fumar y alivian los síntomas de abstinencia. En segundo lugar, la terapia de sustitución de nicotina (TSN), que son los parches, chicles o comprimidos que aportan nicotina sin los químicos tóxicos del tabaco. Por último, está el bupropión, un antidepresivo que también ayuda a dejar de fumar.
Estos fármacos actúan sobre la dependencia física que tienen los pacientes fumadores a la nicotina, ayudando a aliviar los síntomas del síndrome de abstinencia.
Los medicamentos con receta (vareniclina, citisina, bupropión) requieren control médico para ajustarlos a las necesidades del paciente. La TSN no necesita receta, pero su eficacia es mayor si está acompañada de apoyo médico y psicológico.
Recomiendo evitar adquirir medicamentos online sin respaldo científico, ya que pueden ser ineficaces o peligrosos.
—¿Se puede superar la adicción al tabaco solo con medicación?
No es suficiente. Existen tratamientos eficaces y seguros para dejar de fumar, pero el problema de la dependencia al tabaquismo es que también existe un componente de dependencia psicológica. Por ello, la combinación de tratamiento médico con apoyo psicológico es clave.
El proceso de abandono del tabaco requiere un compromiso y fuerza de voluntad por parte del paciente. Con ayuda médica, el proceso es más sencillo y exitoso. El éxito depende del nivel de dependencia física, la motivación y el entorno del paciente.
—¿Por qué es tan difícil dejar de fumar, aun sabiendo que fumar mata?
Efectivamente, el tabaquismo es uno de los principales factores de riesgo de sufrir un infarto de miocardio. También es responsable directo de EPOC y cáncer; y agrava patologías como diabetes, hipertensión y otras enfermedades crónicas.
Los pacientes infravaloran hasta qué punto la dependencia a la nicotina les impide desengancharse del tabaco. Se cree falsamente que es un vicio o una manía, y que se puede dejar con facilidad. Cuando llega el momento que realmente quieren dejar de fumar, es cuando se dan cuenta de que no son capaces.
El paciente más habitual que vemos en consulta lleva entre 20 y 30 años fumando, ha intentado dejarlo alguna vez y no fue capaz, o ha tenido una recaída. En la mayoría de los casos, viene por cuenta propia cuando todavía no ha desarrollado ninguna patología. Son los menos los que acuden derivados por otros especialistas por haber desarrollado ya una enfermedad derivada del consumo del tabaco.
Si quiere plantearnos una consulta escríbanos a consultorio@imqsanrafael.es
https://www.imqsanrafael.es - Las Jubias, 82 - 15009, A Coruña - 981 179 000 - ade@imqsanrafael.es - N* R.S. C-15-000189