El técnico Ramón Mosquera confía en el bloque que la pasada campaña logró el ascenso a Primera B Comienza el sueño. El fútbol, en este caso fútbol sala, es siempre presente. Aceptando tal realidad, los éxitos pasados del equipo de Teixeiro quedan para el recuerdo y el orgullo personal. Desde mañana, la mente de los jugadores que dirige Ramón García está depositada en la temporada 2000-2001, la campaña de la ilusión y el reto. Y es que la Primera B ya no es para andar con batín y zapatillas. Se trata de una competición, como mínimo, de corbata. La gran cita es mañana en el Pabellón Municipal a las 19.00 horas.
05 oct 2000 . Actualizado a las 07:00 h.La plantilla del Seat Teixeiro de la temporada 2000-2001 apenas ha sufrido variación respecto a la que en 365 días consiguiera dos ascensos: de provincial a liga autonómica y de ésta a la Primera B. «Confíamos en el bloque que nos ha dado tantas satisfacciones. Únicamente hay una novedad: se fue Vilariño y entra un hombre que ya perteneció a nuestro club. Se trata de Iván Ares, que procede del Bar Ángel», matiza el entrenador y presidente Ramón García. Así, la plantilla que afrontará desde mañana el gran reto de la competición nacional es la formada por los porteros Charly y Julio; los cierres Nando e Iván; los alas Burriana, Javi, Alfredo, Marco, Rubén y Juancar; y los pivotes Juanillo y el propio Gustavo. En total son 12 jugadores, más la aportación de Javier Penas en la función de auxiliar y ayudante de Ramón García. «Nuestro objetivo es mantener la categoría. Soñar no cuesta nada y la ilusiós es enorme, pero somos conscientes de la dificultad de esta categoría», declaró el técnico de un equipo que ha tenido que duplicar el presupuesto.