La llegada de los veleros convierte la dársena en un espectáculo multicolor y acelera el trabajo de la organización La Cutty Sark ya es una realidad en el centro de A Coruña. El muelle de Trasatlánticos y los nuevos pantalanes deportivos acogen más de dos decenas de embarcaciones que aportan un colorido inusual a la zona. Millares de coruñeses pudieron observar ayer la belleza de los veleros, algunos de ellos de gran tamaño, y compartieron la tarde con regatistas de muy diferentes nacionalidades que convierten la dársena en una babel de lenguas. La llegada anticipada de las naves procedentes de Brest ha obligado, por otra parte, a acelerar el trabajo de la organización. Mañana acabarán de habilitarse los servicios a los navegantes.
23 jul 2002 . Actualizado a las 07:00 h.El espectáculo de la vela crece en los muelles día a día. Aunque la llegada oficial de la regata está prevista para el viernes 26, gran parte de la flota procedente de Brest se encuentra ya en aguas coruñesas. Más de veinte embarcaciones están amarradas, y el resto se reparte por las rías altas. Los que navegan desde Málaga también se aproximaban anoche a la ciudad. Entre ellos, el buque local Fast Ferrari, que fue el primero en cruzar la línea de meta, en las islas Sisargas. Los más de ochenta veleros que integran la Cutty Sark 2002 lucirán todo su esplendor durante el fin de semana, pero la avanzadilla ya ofrece un auténtico regalo para la vista. A lo largo de la jornada de ayer arribaron al puerto los cuatro primeros buques de la clase A, Kapitan Glowacki, Provident, Tante Fine y Royalist, de extraordinaria belleza, que cautivaron a los paseantes. Mientras, la organización trabaja a marchas forzadas para atender a los centenares de regatistas que pueblan el muelle. Aseos, duchas, lavandería, conexión a Internet, tienda y otros servicios estarán disponibles a partir de mañana.