«Coruña es el primer paso en su formación académica, y sentó las bases para esa rigurosa formación que tuvo Picasso. Será una etapa esencial para su carrera artística», explica María Teresa Ocaña, directora del Museu Picasso y comisaria de la exposición de la Barrié.? En total, quince cuadros proceden de colecciones particulares, lo que en la práctica significaría quince oportunidades para contribuir a situar la ciudad como punto clave en el recorrido museístico del pintor. Sin embargo, nada hace pensar que la ciudad pueda contar a medio plazo con una especie de museo Picasso. El Ayuntamiento admitió que la construcción de la Casa Museo se había visto limitada por el presupuesto, lo que la elimina de la carrera. La única institución que se ha lanzado a la arena ha sido Caixa Galicia, que invirtió 700.000 euros para adquirir tres obras.?? Repartidas? El resto de las obras coruñesas de Picasso están repartidas, en su gran mayoría, entre el propio Museu Picasso de Barcelona (que aporta la mitad de las obras coruñesas de la Barrié), el Musée Picasso de París, el Museo Picasso de Málaga y colecciones americanas. La mayoría han ido a parar a la Barrié, aunque hay algunas ausencias notables, como La habitación del Dr. Pérez Costales y Conchita .? Sin embargo, sí que cuenta con la obra fundamental de sus primeros años, la Muchacha de los pies descalzos , un cuadro cedido por el Musée Picasso de París. El cuadro fue realizado a partir de un boceto de su maestro compostelano, Isidoro Brocos, y está considerada como la mejor de las obras de su etapa atlántica. «En A Coruña afloran las capacidades del Picasso adolescente», relata Ocaña.?Los pinceles de Picasso, esos que pintaron a la muchacha de los pies descalzos y a la ciudad de finales del XIX, siguen vivos, inoculando la fiebre picassiana a quienes se acercan a sus dominios, dejando un rastro que conduce hasta Los Cantones.