Reportaje | A punto de agotarse los disfraces de vaqueros Como en las películas, a los indios les toca perder. Vence el séptimo de caballería para ellos y, para ellas, de nuevo, las princesas. Los trajes, cuanto más cursis, mejor
19 feb 2004 . Actualizado a las 06:00 h.?ay cosas que nunca cambian. Llega el carnaval y, año tras año, los centros comerciales se llenan de los disfraces de siempre. Para ellas, las princesas. Para ellos, los indios y vaqueros. Dependiendo del estreno cinematográfico más próximo en el tiempo, se hacen un hueco en las estanterías los trajes de superhéroes. Harry Potter y sus trucos de magia, estrella indiscutible de la última temporada, ha cedido su sitio a Spiderman y a El increíble Hulk. Los forofos de El señor de los anillos se han tenido que conformar esta vez con confeccionar su propio disfraz. «Sí hay posibilidad de montar el traje con los accesorios que nos han llegado, como caretas, capas o armas, pero este año no se ha recibido el disfraz completo», explicaron desde El Corte Inglés. En este centro comercial han ganado los buenos. «Sí, se han agotado los disfraces de vaquero. Es habitual una fuerte demanda, pero hacía años que no se agotaban», relata el responsable de la planta de juguetes y ropa de niños. Porque son los más pequeños, los de entre 6 y 12 años, los culpables de que se hayan quedado sin existencias. En esa edad, las niñas se han inclinado, un año más, por los trajes de princesas. Se vendieron, sobre todo, los de Barbie Lago de los Cisnes . «Es lo de siempre. Las niñas buscan sobre todo vestidos que no se ponen a diario. Cuantos más volantes, gasas y adornos lleven, mejor», explica uno de los dependientes, que añade que, para los más pequeños, las madres se han decantado por disfraces de animales. Brujas y esqueletos En complementos, la lista de la compra sitúa en primer lugar las escobas para brujas, seguidas de los tridentes para los demonios y las pelucas para los choqueiros. En caretas, la mayor demanda se ha registrado en las que calcan los rostros de los personajes del año. Triunfan, sobre todo, Mariano Rajoy y Sadam Huseín, que le ha arrebatado el papel de malo a Bin Laden, agotado en todas las tiendas en los carnavales del año 2002. Las reproducciones de Aznar, Bush, Ana Botella o Fraga, según explicaron desde un establecimiento de la calle Panaderas, no han obtenido la respuesta esperada en un principio.