Su desbordante energía vital fue la que le llevó a una temprana muerte cuando tenía mucha vida por delante. Había nacido hace 55 años en A Coruña, hijo de José Mosquera Rodríguez, propietario de la cafetería Rima, en la calle Feijoo, y de Carmen Novo Noval, oriundos de Présaras.
Estudió el bachillerato y pronto ejerció su actividad como empresario al inaugurar, en 1978, la discoteca Chaston, en la calle Costa Rica, que pronto se convirtió en uno de los centros de reunión más frecuentados de A Coruña. También tuvo en Santa Cristina otra sala de baile con el nombre de Volvoreta.
A los 30 años fue sometido a un trasplante de riñón en el Juan Canalejo, uno de los primeros que se llevaron a cabo en esta residencia. Años después sería necesario efectuarle otro trasplante del mismo órgano.
Fútbol sala
Pero, aparte su trayectoria empresarial y su carácter afable, Mosquera pasará a la historia como protagonista de la gran aventura personal del Chaston, equipo de fútbol-sala que fue el club más emblemático de este deporte en la década de los 80, pues, entre otros triunfos fue campeón de la Liga Española en las temporadas 84-85 y 85-86, además de otros subcampeonatos, como en la 87-88, así como la Copa del Rey en las 85-86, 86-87 y 87-88.
En el Egasa Chaston figuraron jugadores de la talla de Vituco (ex-defensa del Deportivo e internacional español en numerosas ocasiones en fútbol-sala); el brasileño Denis (que fue el primero de su país que actuó en este deporte); Fito, Olaiz (también ex-futbolista profesional), Ramiro, Luis Gómez, Castillo y Sánchez. Uno de los técnicos de este equipo fue Lolo Gantes, informador deportivo de La Voz y gran mantenedor de este deporte.
Miguel Mosquera y el Chaston demostraron que desde la periferia gallega se podía hacer frente a los grandes equipos españoles y las importantes marcas que lo patrocinaban.
Una rápida dolencia puso fin el pasado día 26 de abril a este gran personaje, empresario y deportista coruñés.