Los expertos creen que el futuro establecimiento debería ofertar al menos cien plazas para que sea rentable
13 jul 2009 . Actualizado a las 13:31 h.La propuesta del alcalde coruñés, Javier Losada, para que la antigua cárcel provincial acoja un parador nacional ha sido aplaudida y apoyada desde diferentes ámbitos políticos y sociales de la ciudad. Aunque se da por supuesto que los trámites serán lentos y complicados, la respuesta de la ciudad ha sido bastante positiva.
Francisco Canabal, presidente de la Asociación Empresarial de Hospedaje de A Coruña (Hospeco), considera el proyecto «una magnífica idea» ya que supondría una gran mejora para la ciudad. Reconoce que es difícil sacar adelante una iniciativa de este tipo, ya que la rehabilitación del edificio tendría un coste económico muy elevado y los trámites son lentos. «Sin embargo, creo que podría ser viable». En este sentido, indicó que para rentabilizar la inversión habría que habilitar en el edificio al menos cien plazas hoteleras. Además, Francisco Canabal explicó que el solar de la antigua cárcel, con más de 35.000 metros cuadrados de superficie, tiene enormes salas y comedores que podrían ser recuperados para la organización de grandes eventos e incluso congresos. «Eso sería añadirle más valor a un edificio emblemático y singular, situado al lado de la torre de Hércules, el icono más importante de la ciudad y que ahora es patrimonio de la humanidad», afirmó.
El presidente de los hoteleros recordó que de los 90 paradores nacionales que existen no todos son edificios emblemáticos. «La antigua cárcel coruñesa sí lo es», aseguró, y, por lo tanto, se postula como una fuerte apuesta para que el Gobierno central decida invertir en su restauración.
Además, Canabal considera que la apertura de un establecimiento de este tipo «no haría mella en el resto de la oferta hotelera» de la ciudad. En este sentido, indicó que en A Coruña solo hay un hotel de cinco estrellas, el Hesperia Finisterre, y que por lo tanto un parador completaría la oferta actual. Aclaró que, no obstante, para que el proyecto sea completo habría que apostar con el mismo interés y fuerza por completar las infraestructuras de la comarca. «Porque de qué nos sirve tener hoteles sin un aeropuerto competitivo y sin la llegada del AVE», dijo.
El grupo municipal del PP fue algo más cauto a la hora de valorar la propuesta del alcalde. Indicaron que, por el momento, consideran la idea «ni buena ni mala» y esperan que el regidor «concrete más el proyecto y lo someta a diálogo con las fuerzas políticas y sociales». Añadió que no pueden tener una opinión clara sin haber consultado antes al sector hostelero y hotelero. «Hay que hablar con las partes, ver posibles alternativas y que el alcalde la consulte con los ciudadanos», insistió. El concejal popular Julio Flores recordó que los datos que manejan los representantes del sector hotelero indican que el nivel de ocupación escasamente supera el 50%, «por lo que habrá que estudiar si es bueno o no».
Cuidado del entorno
El presidente del Instituto de Estudios Torre de Hércules, Segundo Pardo Ciórraga, explicó que, personalmente, no se opone a que haya un parador nacional en el antiguo edificio, «pero serán los técnicos y los expertos en turismo los que tengan que decir si el proyecto puede ser viable». Recordó que hace un par de semanas los responsables de la Unesco exigieron un cuidado exquisito para el entorno de la Torre, «por lo tanto eso hay que tenerlo muy en cuenta». Pardo Ciórraga considera que no hay que olvidar que la vieja prisión provincial debería usarse, fundamentalmente, «para la promoción de la Torre, crear un museo de faros y un punto de información.