La compañía afirma que ha cumplido el preacuerdo del convenio
27 jun 2011 . Actualizado a las 11:41 h.Fuentes de la dirección de la empresa Albada calificaron ayer de «chantaje» el anunció del comité de empresa de la planta de tratamiento de basuras de Nostián acudir a la huelga si no se readmite a un trabajador y porque se está incumpliendo el preacuerdo colectivo alcanzado el 24 de abril pasado. Desde la compañía afirmaron que bajo ningún concepto se va a contemplar la readmisión del empleado despedido -Fernando Balay-, ya que se trata de un despido irrevocable, que se produjo tras haberse instruido con todas la garantías legales un expediente sancionador.
Dicho informe fue abierto tras protagonizar dicho trabajador una agresión física a un vigilante de la planta de Nostián en una concentración que tuvo lugar delante de la fábrica el 24 de abril. Según recuerdan desde la empresa de tratamiento de residuos, el guarda jurado le advirtió de que no podían entrar dentro de la factoría, y el trabajador comenzó a increparle y finalmente llegó a agredirle. De hecho, en estos momentos se están llevando a cabo las pruebas de peritaje forense previas a la apertura del juicio oral sobre este caso que se celebrará en los próximos meses. Asimismo, según fuentes policiales, este mismo trabajador también parece estar implicado en el atentado que sufrió la sede de UGT hace unos meses, y por el que fue llamado a declarar a la comisaría de la Policía Nacional.
Todos los puntos
Por otra parte, Albada también rechaza cualquier acusación sobre el incumplimiento del convenio colectivo, que según afirman desde la compañía, se ha cumplido con todos y cada uno de los puntos acordados en el preacuerdo del 24 de abril. De hecho, ya se está elaborando el documento definitivo para cerrar el convenio. En este punto también destacaron que los miembros del comité de empresa se levantaron tres veces de la mesa de negociación, advirtiendo que no firmarían la propuesta mientras que no se readmitiera al trabajador despedido, algo que Albada considera una elemento coercitivo.
Por último, desde la compañía también admiten que se ha cambiado de puesto a varios trabajadores para poder atender a los nuevos servicios, pero que se ha mantenido la promesa de mantener todos los puestos de trabajo, conservando la categoría y los sueldos de los afectados.
Por su parte, el comité de empresa desmienten todas estas afirmaciones y dicen que no se ha llevado a cabo la subida salarial pactada en abril, y que tampoco se han cumplido los turnos de libranzas de sábados, ni se ha avanzado en el horario laboral pactado.