Batalla por el dominio del aire en la Segunda Guerra Mundial

La Voz

A CORUÑA

La Voz ofrece a sus lectores «Blazing Angels 2», un trepidante simulador

28 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

«Nunca tan pocos hicieron tanto por tantos». La frase fue pronunciada por Winston Churchill en agosto de 1940, cuando el Reino Unido, al borde de la derrota en la Segunda Guerra Mundial, vivía aterrorizada por la posibilidad de una invasión por parte de los nazis. Y está dedicada a los pilotos de las fuerzas aéreas británica, que frustraron las apetencias de Hitler durante la llamada batalla de Inglaterra.

Nadie puede aventurar qué hubiera pasado si el Reino Unido hubiera sido derrotado por Alemania en una fase tan temprana del conflicto. Tampoco se sabe a ciencia cierta si el alto mando germano se hubiera atrevido a efectuar un desembarco terrestre. Sí es seguro que las fuerzas aéreas tuvieron un gran protagonismo en toda la guerra. Y que lo tendrá para los lectores de La Voz de Galicia poseedores de un pecé que mañana adquieran por 50 céntimos más el precio del periódico Blazing Angels 2. Se trata de un completo, entretenido y trepidante simulador que permite revivir, aunque de manera un poco fantasiosa, este y otros episodios clave del conflicto bélico más sangriento de la historia.

Este juego desarrollado por la compañía Ubisoft enrola al jugador en un escuadrón secreto formado por los aliados para desempeñar misiones secretas de alta importancia estratégica y frenar la construcción de un arma de destrucción masiva por parte de los nazis.

Hasta ocho jugadores

Tiene el atractivo de incluir una trama argumental bastante elaborada y de permitirle volar y combatir -en modo arcado o en modo simulador- en aviones no convencionales, en aeronaves que durante la Segunda Guerra Mundial eran meros prototipos. Tiene más de cuarenta aparatos a su disposición para volar a lo largo y ancho del viejo continente y visitar capitales como París, Roma o Moscú. También para viajar a destinos más exóticos como El Cairo o las cumbres del Himalaya. No es necesario que vuele solo. Puede enrolar a otro piloto humano para compartir tareas o también pelear contra un escuadrón de hasta ocho jugadores.