1 A la misma hora y en dos locales de hostelería céntricos y populares. La psicóloga Mónica Forteza y la arquitecta Marta Gómez debutaron ayer como pintoras. Bueno, pintando llevan bastante tiempo, pero digamos que se atrevieron por fin a exponer sus obras. «Casi prefiero no vender, pero hay que aprender a desprenderse de ellos», me comenta Mónica en el café Marita Ron, en cuyo patio cubierto del fondo colgó los cuadros a los que dedicó mucho esfuerzo, tesón e imaginación. Debido a sus limitaciones físicas, para el montaje de la muestra contó con la ayuda de su hermana Cristina y su amiga Pilar con su hijo Hugo y un amigo.
Tonos tostados
2 Son los predominantes en los trabajos de Marta. «Mi formación artística se debe en gran medida al pintor Pedro Bueno, mi maestro desde hace mucho tiempo», apunta poco antes de la inauguración en Casa Ponte, cuyo propietario, Jorge Otero, debutará como padre dentro de muy poco. Pero lo de ayer fue el debut como pintora de esta arquitecta que bautizó la muestra con el título de Primeros. «Este año me lo tomé más en serio y tenía más material, por eso me decidí», comenta.
Hípica y Celtas Cortos
3 Lo del concierto de verano de la Hípica ya es una cita clásica. Desde que en el 2007 decidieron contratar a Los Secretos para celebrar el 50.º aniversario de la sociedad pasaron por allí Burning, Danza invisible, Nacha Pop, La Unión, Los Limones, La Frontera y, el próximo viernes 18 de julio, ya tienen confirmada la presencia de Celtas Cortos, que tendrán como teloneros a la banda local The Cruze. Cada vez lo va a tener más difícil el equipo que capitanea Santiago Togores para encontrar grupos de este perfil, que no hay tantos. Como en las anteriores citas, el concierto es gratuito para los socios, que además pueden invitar a amigos. Ya lo saben, si les gusta la música de este grupo vallisoletano que tuvo mucho éxito en los noventa con canciones que ya forman parte de nuestra historia musical y no son socios de la Hípica, busquen un amigo que sí lo sea.
El conserje de siempre
4 Durante los últimos 37 años Manuel García Fernández no faltó a su cita. Desde 1977 hasta el 2014 llegó al instituto Salvador de Madariaga (el Masculino) antes de las ocho de la mañana para abrir las puertas y poner todo en orden. Con motivo de la jubilación de este conserje, un centenar de compañeros y amigos se dieron cita en el restaurante del monte de San Pedro. Manuel que acudió acompañado por su esposa, Lola, también conserje, que se jubiló recientemente en el IES Elviña, se emocionó mucho, en especial cuando le entregaron la placa conmemorativa y cuando el grupo Tumbalobos, integrado por personas vinculadas a la educación, interpretó temas como este que dice: Nós querémoste moi ben e témosche admiración porque na coserxería tí es capitán maior. «Tú eres la persona que mejor conoces el instituto», dijo durante su intervención Fausto Torío, profesor jubilado y ex director del centro donde tantos y tan buenos recuerdos deja Manuel, el conserje de siempre.