Lleno hasta la bandera en los comercios

MONTSE CARNEIRO A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

Papá Noel no destierra a los magos: esta semana la afluencia a las tiendas triplicó la habitual

05 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Juguetes, ropa, libros, perfumes, relojes, ordenadores, joyas de plata, teléfonos inteligentes y, subiendo cada año, sobres con dinero. Un estudio sobre hábitos de consumo en Navidad elaborado en noviembre por la consultora Deloitte concluye que los magos de Oriente llegarán esta madrugada cargados de regalos prácticos -algo menos para los niños, aunque tampoco ellos se libran de los pijamas, calcetines y zapatillas que nadie pide y siempre aparecen- y así lo confirmaron trabajadores de tiendas de A Coruña donde ayer se surtían sus majestades. Mayormente en Marineda y Cuatro Caminos - de acuerdo con el informe, más de la mitad de los consumidores acuden a las grandes superficies y centros comerciales, frente al 30 % que prefiere las tiendas minoristas-, la afluencia durante toda esta semana ha triplicado la habitual. A las doce de la mañana de ayer, en la línea 11 de autobús que cruza la ciudad desde Monte Alto hasta la Grela viajaban tantos usuarios de pie como sentados. A la una de la tarde el aparcamiento de Marineda llegaba al límite de su capacidad y a las 14.45 la ausencia de taxis en la parada propició que grupos de personas compartiesen viaje hacia el mismo barrio.

De la pizarra al iPhone

En uno de ellos viajaban Patricia y Pilar, madre y abuela de un pequeño de 6 años que acaba de salir del hospital y le ha pedido a los Reyes una PS4. Por lo pronto recibirá una pizarra de pie con estructura de madera que cuesta cuatro veces menos que otro modelo distribuido por una cadena especializada. «La niña ya tiene 15 años y pide un abono para el Dépor y el arreglo del iPhone que se le estropeó en el baño del estadio de Riazor y cuesta 180 euros en el chino de la calle Real», relata su madre. Divorciada y desbordada en vísperas de la gran noche, clama por una forma de conciliación también para poder comprar. «O lo haces on-line [más de un cuarto del presupuesto para regalos navideños se consume por Internet, según Deloitte] o resulta complicadísimo», explica.

Dos tradiciones

Patricia vivió años en México con la figura de Santa Claus presidiendo la Navidad. Fanny es uruguaya y en su casa los Reyes mandan. «Ropa, nunca dinero y siempre por sorpresa», explica. María José tiene un yerno irlandés, todos sus hijos viven fuera y sus nietos hablan con tanta fluidez en castellano como en inglés. «Yo soy de una cultura que celebra los Reyes, pero no se trata de lo que me guste a mí sino de lo que viven ellos. Y la ilusión de mis nietos es Santa Claus. Acaban de marcharse todos de Galicia con sus sobres para que compren lo que quieran y ahora es cuando yo tengo tiempo para comprar mis cosas y mis detallitos». Adrián y Bibiana, padres de un niño de 3 años, son de los que lo celebran todo. «Es inevitable», opina la madre de Adriel, cargada con sus bolsas en uno de los pasillos de Marineda.

Cuatro horas después, el enjambre humano en el mismo corredor hacía imposible detenerse. A las seis de la tarde empezaron las retenciones en dirección entrada -complicadas después a causa del vuelco de un vehículo en el arranque de la autopista a Carballo- y alrededor de las 19.30 el atasco ya se había generalizado. En Marineda, pero también en el centro, donde el pequeño comercio se afana en la que es su gran temporada anual.