La Ciudad de las TIC arrancará al menos con 15 empresas y 2.500 trabajadores
A CORUÑA
La zona deportiva y de ocio de la fábrica de armas mantendrá su uso público
24 ene 2019 . Actualizado a las 20:08 h.Una quincena de empresas han confirmado ya su compromiso con la Ciudad de las TIC que la Universidade da Coruña (UDC) impulsa en terrenos de la fábrica de armas con el respaldo de las principales Administraciones públicas y el Clúster TIC. Esas firmas han confirmado su intención de ocupar espacio en la factoría, donde desarrollarían su labor 2.500 trabajadores. Pero es solo la punta de lanza de una iniciativa que despierta interés de otras empresas que hacen sonar a diario el teléfono del Rectorado. «Polo de agora hai unhas 15 comprometidas -confirma Julio Abalde, rector de la UDC-, pero temos outras que están á expectativa e din que se o proxecto vai adiante contemos con elas».
Las empresas
Transferencia tecnológica. Indra, Éveris, R, Cinfo o Atos son algunas de las firmas que quieren espacio en la fábrica de armas, cuyo nuevo proyecto recibió el miércoles el plácet del Ministerio de Defensa. Les seduce «la constitución de un verdadero campus TIC, compartiendo un mismo entorno con los grupos de investigación de la UDC, lo que facilita el desarrollo y la transferencia tecnológica», explica Alfredo Ramos, director general de R. Añade que para esta empresa supondría además «un relanzamiento del proyecto», ya que tratarían de concentrar dentro de ese concepto «a la mayoría de los profesionales y a los colaboradores más cercanos».
Financiación
Público-privada. «Se necesita unha inversión inicial forte, e aí temos que buscar socios financeiros públicos e privados», explica Abalde. Administraciones y las propias empresas pondrán recursos, pero «o complexo a pleno rendemento será autosuficiente a través da actividade das propias firmas», matiza el rector. Las empresas pagarán por la ocupación del espacio y por los servicios que se les preste.
Espacio útil
Noventa mil metros. Para ser precisos, la Ciudad de las TIC se extiende solo por la concesión de Defensa a la fábrica de armas, 90.000 metros de superficie. La parcela completa es de 270.000, lo que dejaría espacio para otros proyectos paralelos.
Zona de ocio
Para trabajadores y público. Esta zona, en la que hay dos piscinas, una cafetería y una pista deportiva, está cedida por Defensa al Ayuntamiento y es utilizada por vecinos de Pedralonga. Tendrá uso compartido entre el público y los propios trabajadores del complejo. Hay prevista también una guardería. Abalde destaca «o incremento de servizos á cidadanía na zona» por la actividad generada por las empresas.
Forma legal
Cobra fuerza el consorcio. Es la opción que más gusta a Defensa, pero se optará por la que ofrezca mayor seguridad jurídica en la transmisión del uso de la fábrica. Una comisión integrada por UDC, Ayuntamiento y ministerio estudiará este punto de inmediato. Hay dos premisas, la factoría tiene que seguir con titularidad pública y evitar «a creación de entes ad hoc», en palabras del rector.
Los extrabajadores
Compromiso de la UDC. La iniciativa parte de que se buscarán fórmulas para integrar en el proyecto a los extrabajadores de la fábrica de armas. Falta por concretar la forma. «Contamos con buscar unha solución social. Haberá que ver como podemos recuperar a estas persoas. Temos o compromiso de integralas e non deixalas na estacada», confirma el rector.
Actividad
Sector TIC y algo de industria. La fábrica de armas perdió en el 2015 la concesión para fabricar armamento. «Hai posibilidade de diversificación. O que se trata é de manter as capacidades dos traballadores, pero non para fabricar armamento», sostiene Julio Abalde. Y por ahí habría una vía para los extrabajadores de la factoría, con empresas auxiliares instaladas en la Ciudad de las TIC que estén detrás de firmas de armamento. Sería una posibilidad -por ahora hipotética- «de recuperar a esta xente». Los mecanizados parecen la vía más adecuada para encauzar la diversificación. «Teñen sistemas de forxado específico que utilizaban para os canóns -detalla Abalde- e outras técnicas que poden aplicarse a tecnoloxías distintas da militar. Se trata de manter algo da parte industrial nun complexo dedicado ás TIC».