Rey afirma que habrá pacto para el Novo Chuac en cuestión de semanas

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

La Xunta reitera su voluntad de poner en marcha el proyecto lo antes posible

24 oct 2020 . Actualizado a las 20:27 h.

El camino para que A Coruña cuente con un nuevo centro hospitalario, el Novo Chuac, se va despejando. La alcaldesa, Inés Rey, reafirmó ayer en el programa Cita en María Pita, de Radio Voz, su compromiso con el proyecto. La regidora afirmó que el convenio con la Xunta para iniciar los trabajos «estará preparado para firmar en próximas semanas», y añadió que «hoy mismo» -por ayer- se estaba celebrando una reunión entre el Ayuntamiento y la Xunta para hablar del nuevo hospital.

Apenas trascendieron detalles del encuentro, pero todo indica que el gobierno local presentará en los próximos días una contrapropuesta o al menos precisiones al borrador de convenio que la Xunta le envió en mayo. Así se deduce de las palabra de la alcaldesa en Radio Voz, cuando señaló que el Ayuntamiento está «trabajando en hacer las pertinentes correcciones jurídicas, técnicas y financieras» al documento remitido por el Ejecutivo autonómico que «se firmará en breve». 

La necesidad del hospital

Por su parte, fuentes de Xunta reiteraron su voluntad de poner en marcha el proyecto lo antes posible. El Gobierno autonómico ha insistido en que la inversión es necesaria, toda vez que las actuales instalaciones del Chuac casi se mostraron insuficientes durante el confinamiento, y fue preciso levantar un hospital de campaña en Expocoruña ante el riesgo de que la afluencia de enfermos de covid colapsase el centro.

El principal punto de fricción es el desembolso que tendrá que hacer el Ayuntamiento para construir los accesos del futuro hospital. Según el borrador de convenio enviado por la Xunta, la Administración local tendría que abonar 22,2 millones de euros, que se destinarán a pagar las expropiaciones y levantar las nuevas vías. El documento prevé que esa cantidad sea máxima, es decir si se producen sobrecostes los asumiría la propia Xunta.

De acuerdo al calendario del convenio, el abono de las cuotas arrancaría en el 2022, con una aportación de cuatro millones de euros, y continuaría durante cuatro ejercicios más hasta alcanzar los mencionados 22,2 millones. 

Las dudas municipales

Aunque no se ha opuesto de forma abierta a pagar esa cantidad, el gobierno local sí ha manifestado dudas sobre la capacidad del Ayuntamiento para afrontarla. Esas dudas se plantearon en mayo, y siguen sin resolverse en la actualidad. Por entonces el ejecutivo local anunció que solicitaría informes técnicos para analizar la viabilidad del proyecto.

Su contenido aún no ha trascendido, pero es de esperar que se reflejen en la contrapropuesta o las alegaciones que estos días se enviarán al Ejecutivo gallego.

Frente a las dudas municipales, la Xunta ha insistido en la necesidad de levantar cuanto antes el Novo Chuac, que mediante la construcción de un «hospital espejo» multiplicará por más de dos la superficie del centro.

A través de la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, el Gobierno gallego ha invitado en reiteradas ocasiones al ejecutivo local coruñés a tomar una decisión. Pero por el momento no se ha pronunciado. La alcaldesa atribuyó ese parón al gran alcance del proyecto y a lo accidentado del año político, incluyendo la celebración de las elecciones autonómicas y el período de interinidad que supusieron para la Xunta. Pese a todo, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, insistió esta semana en que los trámites para construir el hospital «non se van parar» y añadió que el Novo Chuac «vaise facer, sen dúbida. É un proxecto fundamental».

El compromiso de colaboración de la alcaldesa y Feijoo se acerca a su prueba de fuego

En julio del 2019, la alcaldesa, Inés Rey, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, mantuvieron una reunión en la que se comprometieron a relanzar los proyectos claves para A Coruña, desde la estación intermodal hasta el centro de salud de Santa Lucía, pasando por el Novo Chuac o la Ciudad de las TIC.

La reunión sirvió a ambos dirigentes para publicitar la llegada de un nuevo tiempo tras los cuatro años de la Marea Atlántica, marcados por las broncas con la Xunta. La colaboración permitiría a Feijoo desmentir las acusaciones lanzadas por ese partido de que había bloqueado las inversiones en la ciudad por motivos electorales. Al mismo tiempo, daría alas a la alcaldesa para distanciarse de su predecesor, Xulio Ferreiro, al que el PP reprochaba haber paralizado todos los proyectos estratégicos de la Xunta también por intereses políticos.

El estallido de la pandemia del covid y la rotura de los compromisos por parte de otras instituciones, como es el caso del ADIF con la estación intermodal, alargaron los plazos e impidieron que ese compromiso se materializase.

Pero ahora debe dar resultados. La Xunta está redactando los presupuestos del 2021, en los que debería reflejarse ese compromiso de colaboración con partidas que permitan reactivar los proyectos pendientes. De lo contrario, la promesa de cooperación sufrirá un golpe contra su credibilidad que otras fuerzas políticas, como el ascendente BNG, podrán explotar, sea en el Parlamento gallego o en el pleno, para exigir responsabilidades al partido, o partidos, que no hayan mantenido su compromiso.