Formada en Inditex, cumple 13 años al frente de una tienda multimarca por la que nadie apostaba: «Me decían si estaba loca»
10 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Es de las que ve siempre la botella medio llena. «Soy positiva. Mucho. Y vitalista. En la tienda hay muy buen ambiente e intento que se hable lo menos posible del covid», comenta Estela Pernas González. Esta semana celebra que su negocio de ropa multimarca cumple 14 años. «Pasaron volando. Todavía recuerdo que cuando abrí la gente me decía si estaba loca. Era el año 2007 y ya se hablaba de la crisis que venía. Pasamos por momentos duros y hubo noches en que costó dormir, pero nunca perdí la sonrisa en el trabajo. Se habla mucho de los autónomos, pero ser mi propia jefa es algo que no cambio por nada», asegura la propietaria de The Mint. No hay muchas tiendas pequeñas que sean capaces de aguantar tanto tiempo con buenos resultados. Estela se emociona de verdad (se seca las lágrimas) cuando habla del público. «No puedo estar más agradecida por el cariño que me muestran. Hay clientas que se han convertido en amigas y me emociono al pensar en ellas», destaca mientras en la cafetería de San Andrés en la que charlamos la gente empieza a hablar de las nuevas medidas para frenar la pandemia.
Aprendizaje en Inditex
Perfeccionó su inglés en Chicago y después estudió relaciones laborales. Siempre le gustó la moda y, tras superar una entrevista, empezó a trabajar en Inditex. «Estuve 5 años. Es la mejor escuela que existe y estoy muy satisfecha del tiempo que estuve allí y todo lo que aprendí», recuerda esta empresaria de 46 años y madre de dos hijos de 17 y 15, Candela y Guille. Justo después de tenerlos montó el negocio. «Me gusta mucho la música y siempre le decía a una amiga que si algún día formase un grupo le llamaría The Mint». En vez de una banda fundó una tienda en la calle Álvaro Cebreiro. «En aquel momento no había despuntado la zona de la plaza de Lugo y me encantó esta placita. Pensé en cambiarme, pero creo que este es mi sitio y en A Coruña no hay distancias», afirma.
Lilas, malvas y morados
Es muy habladora. «Y sociable y extrovertida. Soy tocona y de dar besos porque soy muy cariñosa, pero me tuve que acostumbrar a no ser tan efusiva estos meses», confiesa. Dice que su principal defecto es que es «exageradamente perfeccionista. Cuido los detalles. Por ejemplo, hago cantidad de fotos a las prendas antes de subir a redes sociales la que me parece mejor. Eso sí, todas las prendas que cuelgas en Instagram se venden. También nos funciona muy bien la página web, que justo estrenamos en abril. La venta online nos ayudó mucho». A pesar de la situación actual se muestra optimista con el futuro inmediato y con la primavera que vendrá. «Se van a llevar los lilas, malvas y morados. Son colores que yo nunca había usado, pero que están presentes en todas las colecciones. Tenemos en exclusiva algunas marcas. Trabajamos con firmas nórdicas, francesas y españolas y siempre intentamos innovar pero siendo fiel a un estilo. Voy a París dos veces al año, y más a showrooms que a ferias. Soy de las que no duermen hasta que tienen la colección completa. Cada seis meses hay que realizar una gran inversión y arriesgas mucho, pero lo voy a hacer hasta que pueda», sentencia.
El concierto de Vetusta
Recuerda lo bien que lo pasó en el concierto que uno de sus grupos favoritos ofreció en el Coliseo el 28 de febrero, dos semanas antes del confinamiento. «Estoy deseando que puedan volver los conciertos. Soy una loca que escucha música a todas horas. Me gustan Angus & Julia Stone, The xx, Love of Lesbian o Vetusta», reconoce. Le gusta vestir de negro y su prenda favorita es un vestido largo, ya sea invierno o verano. «No suelo llevar tacón y siempre utilizo prendas oversize. No me veo con algo muy escotado o muy ajustado. El 90 % de lo que llevo, incluidos los complementos, es de la tienda. Es fundamental dar buena imagen», analiza Estela. «Hay que promover la compra responsable. Adquirir menos, pero de más calidad y que te dure varias temporadas. Apostar por prendas de moda, pero atemporales. Lo que se denomina slow fashion», sentencia.