



















La tregua meteorológica permite disfrutar a grandes y niños de más de 60 disciplinas al aire libre
27 jun 2021 . Actualizado a las 22:11 h.Cuesta decidir quién estaba más contento, si Brais, que por fin se podía reunir con otros amigos en una actividad al aire libre, si su madre, Patricia, o su bisabuela, Ofelia, que con 83 años no quiso perderse el ejercicio de taekuondo del pequeño. Este domingo las plazas de la ciudad fueron para ellos: los deportistas profesionales o aficionados. Tras un año de pandemia, el gobierno local retomó el Día do Deporte na Cidade.
El covid ha revalorizado los espacios rurales, pero también ha concienciado sobre lo esencial de los rincones abiertos, públicos y verdes en el centro urbano y sobre el ejercicio físico. Por eso, que nueve puntos de A Coruña se convirtieran en una gran cancha deportiva está siendo un espectáculo en abierto y para todos los públicos, incluidas las personas con distintas capacidades.




















«Brais venía emocionado. Llevan un año muy complicado. Se les impusieron muchos límites a la hora de hacer este tipo de actividades. Para ellos hacer algo distinto, normal, es muy importante. Tiene cinco años y desde los tres estuvo mucho tiempo encerrado en casa, fue difícil. Cuando lo ves relacionándose con otros niños es muy bonito», cuenta su madre, Patricia, de Mesoiro.
La Escuela Garrapucho, de la que es alumno Brais, es una de las 76 entidades deportivas que participa este domingo en el evento. «No paramos de entrenar, siempre con las mascarillas, excepto cuando estuvimos confinados. El día de hoy, aquí fuera, es una fiesta para ellos», contaba mientras controlaba a los chavales José Luis Garrapucho. En su actividad, que se realizó en la explanada de Méndez Núñez, participaron chicos de tres a 14 años.
Taichí, tenis, escalada, danza, remo o boxeo fueron otros de los deportes protagonistas en una celebración que evitó circunscribirse a las prácticas mayoritarias. «Es genial jugar con estas piezas tan grandes, son casi de mi altura», exclamaba un entusiasta del ajedrez de tan solo nueve años como es Adrián, de Culleredo. Mueve alfiles y torres «desde siempre», desde que con tres años su padre Alejandro le metió el gusanillo en el cuerpo. Disfrutar del deporte de una forma lúdica y empaparse de sus valores, o «filosofía», como destacó la concejala de Deportes, Mónica Martínez, es el objetivo de este programa con tradición en la ciudad.
Este 2021 de regreso paulatino a la normalidad, las actividades, que se realizaron de mañana y de tarde, se descentralizaron y redistribuyeron por nueve zonas. Fueron la Cidade Deportiva A Torre-Arsenio Iglesias y también la de Riazor, la pista de Adormideras, la de petanca de San Amaro, Méndez Núñez, la Casa del Agua y las plazas de San Pablo y Tabacos, además de la playa de Oza.
Más de 60 especialidades repartidas en nueve puntos y para todos los públicos
Con mascarillas, porque aunque estaban en exteriores eran varios en cada grupo, pero con las sonrías que se intuían en sus miradas, cientos de chavales se sumaron a las actividades. También adultos y muchos jubilados. Los que realizaron tres distintas se llevaron una camiseta. Los que superaron la cifra, entraron en un sorteo cuyos resultados están en la web del área de Deportes.
Entre las más de 60 especialidades, hubo un hueco para aprender técnicas de reanimación cardiopulmonar y la maniobra de Heimlich. «Vino bastante gente. Hacer deporte, y en grupo, es gratificante y aprendes valores», defendió Isaac, de la organización.