Desacuerdos institucionales aplazan la creación de la gestora de la Cidade das TIC

M. CARNEIRO A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

La UDC anuncia la convocatoria de un concurso de ideas para diseñar el edificio más emblemático del campus de Pedralonga

30 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Con alguna demora importante, la Cidade das TIC sigue su curso. La UDC anunció ayer la convocatoria de un concurso de ideas para diseñar el edificio más emblemático del campus, una construcción de nueva planta ubicada en el extremo norte de la parcela, en «un lugar estratégico» que le dará «gran visibilidad» y convertirá este centro de investigación en «un hito dentro del complejo con arquitectura del siglo XXI», avanza Amparo Casares, vicerrectora de Infraestruturas.

El concurso llega con el convenio del que saldrá la sociedad gestora todavía sin firmar. Se trata de un documento que tienen que consensuar el Igape, el Ayuntamiento, la Diputación, la UDC y el Clúster TIC para dar forma a la entidad y preparar su constitución, pero 20 meses después de la cesión de los terrenos el pacto sigue sin cerrarse por desacuerdos entre administraciones. «Esto está empezando a ser un problema -apunta el rector coruñés-. Nos está paralizando determinadas cuestiones que tenemos que resolver y la universidad no puede llevar adelante como titular, entre otras cosas, por respeto al resto de las instituciones».

Julio Abalde insta a los socios a «arreglarlo lo antes posible, porque si no nos va a ralentizar mucho», y apela a procedimientos que tienen por delante como sacar a concurso una concesión, buscar financiación, socios, «o sin ir más lejos optar a los Next Generation, que la universidad no puede hacerlo pero la sociedad sí. Hay que empezar a constituirla ya», reclama el rector. 

En noviembre, obras

El polo de innovación de Pedralonga dejará de ser en noviembre un proyecto sobre el papel. El 5 de octubre finaliza el plazo de presentación de propuestas para rehabilitar el Centro de Servizos Avanzados de acuerdo con el proyecto del arquitecto Carlos Pita, y un mes después está previsto que las máquinas entren en el primer pabellón que recuperará la actividad en la antigua fábrica de armas. «A finales del 2022 habrá gente trabajando en el CSA», estima el rector, que anuncia para el mismo año el inicio de los trámites de rehabilitación de cinco edificios. «El año que viene iniciaremos el centro de servicios, el de gestión [en el edificio que ocupaba la dirección de la fábrica], tres pabellones más y ya trabajamos en una lanzadera de empresas de alta tecnología con financiación europea».

Más habrá que esperar para ver en pie el centro de investigación que funcionará como icono de la universidad, un edificio de 25 metros de altura y 6.500 metros cuadrados al lado de la zona verde central, al que se trasladará el actual Citic. El concurso de ideas da de plazo hasta el 10 de noviembre para que arquitectos y estudiantes presenten sus propuestas, y ofrece 20.000, 10.000 y 7.000 euros a los tres mejores. Ya con las maquetas (y los diseños en BIM) en la mano, la UDC buscará financiación para el edificio, que podría proyectar el propio ganador del concurso.

De los inciertos Next Generation a los más accesibles fondos Feder

La gestión de los fondos de reconstrucción sigue rodeada de una nebulosa que impide ver con claridad el desenlace de los 55 millones de euros que la Xunta propuso al Gobierno central para movilizar en la Cidade das TIC, tras elegirla entre los 108 proyectos para los que solicitó financiación europea. La universidad coruñesa tiene previsto presentarse a convocatorias para rehabilitación y eficiencia energética, y ya ha enviado una declaración de intenciones para servicios de digitalización de empresas. Sin embargo, la enorme fragmentación de los Next Generation convierte el mapa de posibilidades que dibujan los fondos en un puzle de difícil encaje en el complejo de Pedralonga.

Otra vía de financiación tiene que ver con los fondos Feder, que comprenden el período 2021-2027 y a pesar de que todavía están sin perfilar, ofrecen la ventaja de que se gestionan desde Galicia. Por otra parte, con los tiempos que maneja el equipo de Abalde para el polo tecnológico, los Feder no le permitirían incluir las actuales inversiones, mientras que los Next Generation consienten todos los gastos del 2020 en adelante.