
Coruña se ha transformado en un enclave cosmopolita gracias a la iniciativa de Marta Ortega de convertir el muelle de batería en un centro cultural de primerísimo nivel
17 nov 2022 . Actualizado a las 16:42 h.Aunque los coruñeses estamos acostumbrados a tenerla como vecina, hay que reconocerle a Marta Ortega su devoto coruñesismo. Su querencia a su ciudad, la nuestra, que ella ha situado en el mapa internacional. Lo hizo por vez primera el día en que se casó con Carlos Torretta, a través de los numerosos invitados que conocieron de primera mano lo bien que se vive aquí, porque Coruña se convirtió durante la celebración del enlace en la otra gran protagonista de los focos. Fue entonces cuando Athina Onassis paseó por el Cantón y el Parrote, cuando reveló lo bonita que era esta ciudad y lo a gusto que se encontraba aquí, y fue el día en que los coruñeses nos cruzamos por la calle de los vinos con Jon Kortajarena, Eugenia Silva y otros muchos rostros famosos. Fue el día también en que artistas como Chris Martin y Norah Jones aterrizaron en nuestra ciudad para participar en el festejo de la boda.
Desde ese momento hasta hoy Coruña se ha transformado en un enclave cosmopolita gracias a la iniciativa de Marta Ortega de convertir el muelle de batería en un centro cultural de primerísimo nivel. Los silos inhóspitos que los coruñeses veíamos a través de las verjas del puerto se han convertido en un emblema, en todo un referente artístico, para el disfrute de todos. Lo consiguió con la muestra del fotógrafo Peter Lindbergh y lo hará ahora con la de Steven Meisel gracias a su impulso.
Ver a Naomi Campbell en medio de la tienda de Zara de la calle Compostela da buena muestra de la revolución coruñesística que la hija de Ortega ha iniciado y ya es imparable. Nombres únicos de la moda y del arte se pasean por nuestra ciudad con la naturalidad de una gran metrópolis. Coruña hoy está en lo más alto.