Se filtran imágenes de los agentes acusados de acabar con la vida al empresario gallego; según las autoridades filipinas «se rindieron de manera conjunta y voluntaria»
15 feb 2023 . Actualizado a las 16:59 h.El 2023 ha comenzado con noticias algo esperanzadoras para la familia de Diego Bello Lafuente, el empresario coruñés de 32 años acribillado a tiros en la isla filipina de Siargao en enero del 2020. Sus reivindicaciones bajo el lema «justicia para Diego» parecen estar dando sus frutos. Este martes recibían la confirmación por parte de la justicia filipina de la noticia que el viernes les había adelantado el embajador del país asiático en España vía correo electrónico: los tres policías acusados de disparar al joven se habían entregado a las autoridades y estaban arrestados en comisaría. Llevaban desaparecidos, con orden de busca y captura, 11 meses. Este miércoles, desde Filipinas también se han filtrado imágenes de los tres agentes en una audiencia ante el secretario de Justicia filipino, Jesús Crispin Remulla, según adelanta el medio ABS-CBN News y también confirma el abogado de la familia de Bello, Guillermo Mosquera.
Los tres hombres se enfrentan a cargos de asesinato y falsificación de pruebas, pues vincularon al coruñés a una red de narcotráfico, motivo que esgrimieron para justificar los disparos. El embajador de Filipinas en España destacó que se entregaron voluntariamente al grupo de Investigación Criminal de la Policía Nacional Filipina (PNP) en Manila, la capital.
El juzgado encargado del caso, de momento el de Surigao del Norte (la familia ha solicitado el traslado del expediente a Manila, algo que se decidirá en una vista el primero de marzo) ordenó la entrada en prisión sin fianza de los tres agentes, el capitán Vicente Panuelos y los sargentos Ronel Azarcón y Nido Boy Esmeralda, ante la gravedad de las pruebas acusatorias que están en poder de la Fiscalía, destacan fuentes de la familia de Diego Bello.
Por su parte, el ministro filipino de Justicia, Jesús Crispin Remulla, también se ha manifestado al respecto. Ha prometido un «juicio justo» a los tres policías sospechosos de matar al empresario, que se entregaron ante las autoridades tras casi un año huidos, y a pesar de la «trascendencia internacional» que ha adquirido el caso, reconoce Remulla.
En un comunicado, indica que los tres acusados se rindieron de manera conjunta y voluntaria el pasado día 9 en la sede del poder judicial en Manila. Remulla, reza el comunicado fechado el lunes, informó a los acusados de la relevancia internacional que el caso ha despertado y les aseguró un juicio «basado puramente en evidencias».
Los agentes acusaron al gallego de ser un «narcotraficante de alto valor», y alegaron que diseñaron una operación para detener a Bello que acabó con un tiroteo después de que el coruñés supuestamente se resistiera y disparara contra los oficiales. Sin embargo, un informe acusatorio de la Oficina Nacional de Inteligencia (NBI) tumbó los argumentos de los policías, que fueron formalmente acusados de asesinato por un tribunal filipino el 25 de marzo del 2022. Entonces, Panuelos, Pazos y Esmeralda no se personaron en la vista de lectura de cargos ni en otra posterior programada en mayo, lo que impulsó una orden de búsqueda y captura contra ellos.