Lo más importante es que por fin comienzan las descargas de crudo en el puerto exterior y entra en funcionamiento el nuevo oleoducto, lo que significa alcanzar parcialmente la meta que se culminará en el 2027 al eliminar definitivamente el puerto petrolero y el oleoducto del centro de la ciudad
18 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La refinería fue inaugurada en 1964 juntamente con el puerto petrolero de San Diego y el oleoducto conformado por 14 tuberías de entre 15 y 60 centímetros y 6 kilómetros y medio de largo que, cruzando la ciudad, unen puerto y refinería. Desde entonces se produjeron dos accidentes de petroleros dentro del puerto de A Coruña, el del Urquiola, el 12 de mayo de 1976. Tras ser llevado fuera de la bahía, el barco se terminó incendiando y muriendo en él su capitán. Y en 1992, el del Mar Egeo.
Poco antes de las 8.00 horas del 3 de enero de 1992 me llaman del Ayuntamiento diciendo que ha encallado un petrolero junto a la torre de Hércules. En aquel momento era concejal de Seguridad Ciudadana. Los primeros segundos son de sorpresa e incredulidad. Pido un coche con teléfono (ninguno de nosotros tenía móviles en ese momento) y pido que vayan a la sartén de la Torre el jefe de la Policía Local, el jefe de Bomberos y el de Protección Civil. Estando allí y mientras un helicóptero evacúa a los tripulantes del barco, tiene lugar la explosión. Afortunadamente, ni en ese momento ni en todo el proceso se produce ningún muerto ni herido, aunque sí múltiples daños materiales. Todo transcurrió con el acierto de las medidas tomadas por el gabinete de crisis coordinado por la gobernadora civil, Pilar Lledó, y la suerte.
Inmediatamente después del Mar Egeo se plantean dos objetivos: la construcción de un centro de control del tráfico marítimo de A Coruña, que se materializa con la inauguración en mayo de 1995 de la torre de control ubicada en el dique de abrigo (una obra que además de su carácter práctico se transforma en uno de los edificios emblemáticos de la ciudad) y la construcción de un nuevo puerto que permita que los petroleros no entren en la ría, lo que lleva aparejada la eliminación del oleoducto, que si bien es cierto que no produjo, hasta el momento, ningún problema, es muy deseable eliminarlo.
El proceso de la planificación del puerto exterior y su ubicación en punta Langosteira fue arduo. Se tomó como modelo de actuación lo realizado en Baltimore, en la costa atlántica de Estados Unidos. El puerto exterior se comenzó en el 2005 con el compromiso de que el 40 % tendría financiación de la Unión Europea, el 30 % lo pagaría el Ministerio de Fomento y el resto, otro 30?%, el Puerto de A Coruña, que obtendría los fondos con la liberación de una parte de la superficie interior, que sería recalificada para uso urbano. El proceso fue lento, con dificultades internas y externas, pero Langosteira está funcionando, hasta tal punto que de las casi 1.300.000 toneladas movidas en enero del 2023 por el puerto, 500.000 lo hicieron en el puerto exterior, fundamentalmente cereales y carbón.
El Puerto movió el año pasado 15 millones de toneladas en 1.100 buques y han llegado 222.723 pasajeros en 136 naves. Un récord en ambos casos. Seguramente lo más importante es que por fin comienzan las descargas de crudo en el puerto exterior y entra en funcionamiento el nuevo oleoducto, lo que significa alcanzar parcialmente la meta que se culminará en el 2027 al eliminar definitivamente el puerto petrolero y el oleoducto del centro de la ciudad, objetivo previsto desde hace casi exactamente 30 largos años. Creo sinceramente que estamos de enhorabuena.