Mínima actividad de autobuses y mucho pasajero despistado en A Coruña por la huelga del transporte colectivo

A. González / T. Rivas A CORUÑA

A CORUÑA

La mayoría de los afectados son trabajadores que se tienen que desplazar a otros municipios del área metropolitana y también estudiantes del campus de Ferrol

31 mar 2023 . Actualizado a las 12:20 h.

Los trabajadores del sector del transporte de viajeros convocaron para este viernes una huelga para exigir el desbloqueo de la negociación colectiva y el paro se notó desde primera hora. En la estación de autobuses de A Coruña, donde las horas transcurren habitualmente con un trasiego incesante de vehículos y personas que quieren desplazarse a diferentes puntos de la comarca, la imagen esta mañana es bien diferente. A los andenes apenas llegan autobuses, ya que no se cumplieron los servicios mínimos, y los que lo hacen son los de larga distancia, que entran sin problema al recinto. El piquete informativo está apostado en la puerta de salida, donde también hay presencia policial, para impedir la salida de vehículos, pero hasta el momento no se ha registrado ninguna incidencia. 

Lo que sí hay en la estación es pasajeros que, en su mayoría por desconocimiento de la huelga que hay convocada, se plantan como cada día a esperar la llegada de su autocar.

Adriana Espinosa, afectada por la huelga del transporte colectivo en A Coruña
Adriana Espinosa, afectada por la huelga del transporte colectivo en A Coruña A. G.

Tras el asombro inicial, toca buscar un plan alternativo para llegar a su destino. Es el caso de Adriana Espinosa, que suele desplazarse a diario hasta Oleiros en la línea interurbana B6 para cuidar a una mujer mayor. «Cuido a una persona que depende de mí. Está en cama y hasta que no llegue yo a la hora no se puede levantar. Sus hijos están confiados en que yo voy a llegar a mi hora y no lo voy a hacer, por eso estoy preocupada», cuenta la mujer, que a pesar de que entra a trabajar a las 9.30 horas fue a la estación a 7.10 horas y, aun así, no pudo subirse a ningún autobús. «Me dijeron que hoy iban a hacer huelga y vine antes, pensando que un poco más temprano iban a salir, pero nada», lamenta Adriana, que considera que deberían funcionar mejor los servicios mínimos. «Creo que deberían poner un autobús aunque sea a una hora para que el personal que va a trabajar resuelva», expresa.

Argimiro González, vecino de O Burgo afectado.
Argimiro González, vecino de O Burgo afectado. A. G.

Por su parte, el vecino de O Burgo, Argimiro González, tenía que ir a A Coruña a la inspección médica, pero no pudo coger ni autobús, ni taxi. «No había autobuses y los taxis estaban colapsados». «Estuve en la parada desde las ocho menos cuarto de la mañana y hasta las nueve y media y no pasó ni un autobús, solo el transporte escolar. Al final, me trajo un conocido en coche», contó sobre las 11.00 horas cuando decidió ir a la estación de autobuses para ver si podía volver a O Burgo. «Voy a intentar ver si hay algún bus aquí y, si no, cogeré un taxi», apuntó. Aunque le supone un problema, Argimiro, que es conductor de camiones, entiende a los trabajadores. «Como les pusieron los servicios mínimos abusivos, no los están cumpliendo. Hasta me parece lógico», razonó.

En la parada de Entrexardíns también había esta mañana algunos viajeros esperando por autobuses interurbanos. Una de ellas era Sandra Mira, una vecina de Pravio (Cambre), que no sabía que había huelga y desconoce si podrá volver a su casa en autobús. «Vine a renovar el DNI», explicó esta pasajera que habitualmente usa la línea A Coruña-Montouto o la que va a San Pedro de Feáns. «Depende de la hora pasa uno u otro», comentó.

Sandra Mira, afectada por la huelga del transporte en A Coruña
Sandra Mira, afectada por la huelga del transporte en A Coruña César Quian

«No sabía que había huelga. Me enteré antes porque llegó un chico y empezó a gritar "hoy hay huelga de autobuses"», contó Sandra, que detalla cómo fue el tránsito en la parada del centro coruñés. «Vinieron dos buses. Los dos dejaron gente, pero no recogieron a nadie. De hecho, la pantalla de uno del que bajaron personas ponía "fuera de servicio" y el conductor colgó un cartel con celo que ponía "servicios mínimos", pero no subió gente y se marchó», explicó.

Mientras Sandra se ponía los cascos del móvil asumía que iba a esperar en la parada muchas horas. «Mi padre sale a las dos de trabajar. Si no pasa ningún bus antes, a hacer tiempo y que me acerque él», concluía, en una conversación que tuvo lugar antes de las 10.00 horas.

La mayoría de las personas que esperaban esta mañana en la estación son trabajadores que se tienen que desplazar a otros municipios del área metropolitana y también algunos estudiantes que viajan a Ferrol. Sin embargo, muchos ya asumieron desde primera hora que no llegarán a sus destinos. El piquete que se sitúa en la salida consiguió convencer a los autobuses interurbanos que intentaron salir para que dieran la vuelta. Solo lograron hacer su ruta las líneas de larga distancia como un autobús de Alsa que se dirigía a Lisboa y otro que puso rumbo a Algeciras sobre las 8.45 horas, aunque salieron con retraso. Aunque la huelga no afecta al transporte urbano, son varios los conductores de la Compañía de Tranvías que, cuando pasan por delante de la puerta en la que está ubicado el piquete informativo, pitan para mostrar su apoyo al sector.

Concentración

A las 11.00 horas, centenares de trabajadores se concentraron en la salida de la estación para reclamar nuevos convenios colectivos en las cuatro provincias. Xesús Pastoriza, de la CIG, calificó a esa hora la asistencia al paro como «un éxito». «Hai un seguimento masivo a pesar dos abusivos servicios mínimos», remarcó el sindicalista, que celebró que las estaciones están «paradas». Respecto a los servicios mínimos, Pastoriza reconoció que «unha boa parte non se cumpriu». «Houbo unha reacción dos traballadores contra eses servicios mínimos abusivos que imposibilitaban o dereito a folga», subrayó. En cuanto al transporte escolar no supo precisar pero aseguró que «non houbo ningún servicio que funcionara todo». Los sindicalistas explicaron que si la situación no cambia se plantean ir a una huelga indefinida. Lo decidirán en abril.

Normalidad en las rutas escolares

Donde sí hubo el movimiento de un día normal fue en las paradas de las rutas escolares a pie de calle. A pesar de que el paro afecta al transporte concesionado de líneas regulares, al discrecional, al urbano y al escolar, los servicios mínimos decretados establecen que los buses que conectan con los centros escolares deben estar en pleno funcionamiento siempre y cuando el recorrido sea superior a cuatro kilómetros. En esos servicios mínimos generales se incluyen 5.325 frecuencias de transporte regular de viajeros, el transporte de trabajadores a los centros laborales antes de las 9.00 y después de las 18.00 horas y también deberían respetarse los traslados de usuarios a centros sociosanitarios.

Los sindicalistas lamentaron la actitud de algunas empresas y también de la Policía Local de Culleredo, en concreto, por un incidente ocurrido sobre las 7.30 horas en la sede de Alsa Cal Pita en Almeiras. «Sobre 35 autobuses, todos de servicios mínimos, de transporte escolar, salieron por imperativo legal de un jefe de servicio que, con destacamento municipal, impuso el cumplimiento estricto de los servicios mínimos», explicó Pedro Beade, de CC. OO. «Lo que hemos hecho simplemente como piquete informativo es informar a los conductores de que el convenio no se consigue solo», remarcó.