Las bonificaciones empujan al bus de A Coruña a caminar hacia el récord de viajes
A CORUÑA

El acumulado hasta agosto es superior al del mismo período en el 2019
15 sep 2023 . Actualizado a las 08:16 h.La pandemia frenó en el 2020 el crecimiento en el número de usuarios del autobús urbano que se había registrado en los cinco ejercicios anteriores. Las consecuencias del covid se mantuvieron hasta el año pasado, pero los datos registrados hasta agosto indican que ya se está por encima de los que se contabilizaron en el 2019.
Entre los meses de enero y agosto de este año hubo 15.683965 usos del bus rojo, lo que supone un 26 % más que en el 2022 y un 5 % más que en el 2019. De mantenerse esta tendencia se podría superar el récord histórico de 23.003.516 viajes del 2019. Faltan por conocerse los datos del último cuatrimestre del año, que tradicionalmente se sitúan entre los que tienen unas cifras más altas.
Dejar atrás la pandemia y recuperar los hábitos anteriores contribuyen a un mayor número de usos, pero hay otro motivo que ayuda a utilizar este medio de transporte.
En septiembre del 2022 se instauró una bonificación del 30 % impulsada por el Gobierno central en todos los billetes y esta se amplió al 50 % en febrero de este año con una aportación suplementaria del Ayuntamiento.
Los datos demuestran que el número de usos fue mayor en cada mes desde marzo de este año que en el mismo período del 2019, superando en tres ocasiones los dos millones de viajeros mensuales.
La buena trayectoria que mantiene el autobús urbano se aprecia al revisar los datos desde septiembre del año pasado —cuando se instauró la primera de las bonificaciones— hasta agosto. La suma llega a los 23.245.932 usos, lo que supondría un récord histórico para este servicio.
Los descuentos se mantendrán, al menos, hasta final del año y la espera de saber si el Estado ampliará su vigencia. Los beneficiarios de estas bonificaciones son los viajeros que utilizan la tarjeta Millennium o la aplicación Millennium Próxima.
De esta manera, el billete sencillo del bus urbano tiene una tarifa de 0,38 euros y el bono social —desempleados, mayores de 65 años y personas con diversidad funcional— se queda en 0,12 euros por viaje. Mientras, los universitarios abonan 15 céntimos por trayecto.

La aplicación para móviles
Las bonificaciones de las tarifas no son la única novedad que llegó recientemente al autobús urbano, un servicio para el que se dio respuesta a una demanda que llevaba tiempo entre las cuestiones pendientes del gobierno municipal.
En noviembre del año pasado se estrenó la aplicación Millennium Próxima, que permite abonar los trayectos desde dispositivos móviles y recargar el saldo sin tener que acudir a un cajero. Mientras se trabaja en una versión que también sirva para las personas con dispositivos con sistema iOS (Apple) —está en licitación desde el pasado febrero—, esta aplicación cuenta con 31.438 usuarios activos.
Además de las comodidades que incluye, como pagar el viaje desde el móvil o no tener que acudir a un banco para recargar, también reduce el volumen de problemas que generan las tarjetas físicas, cuyos fallos son motivo de queja de los usuarios desde su implantación y que muchas veces se ven acompañados por las dificultades para obtener una cita y ser atendidos para buscar una solución.
«Ningún goberno municipal apostou tanto polo transporte público como o de Inés Rey, asumindo con cargo ao orzamento municipal importantes contías para complementar a bonificación estatal. Hoxe o bus custa 38 céntimos, menos que hai 20 anos, e os universarios pagan só 15 céntimos por cada viaxe. O acerto da aposta polo transporte urbano vese nas cifras de usuarios», asegura José Manuel Lage. El concejal de Economía e Planificación Urbana destaca que la implantación de la app «contribuiu a esta mellora nas cifras». «Seguiremos apostando polo transporte público para facelo máis eficiente e máis útil e ofrecer así unha alternativa mellor que o transporte privado para os desprazamentos na cidade».
«El descuento empezó justo cuando me vine aquí a estudiar y en el inicio siempre ayuda»
Las bonificaciones en las tarifas del autobús urbano benefician a usuarios de diferentes edades o que lo utilizan por motivos variados, pero resultan muy útiles para todos.
Aroa Hernández llegó hace unos meses a la ciudad desde Monforte de Lemos para estudiar en la Universidade da Coruña y se encontró con una grata novedad. «El descuento empezó justo cuando me vine aquí a estudiar y en el inicio siempre ayuda, fue una buena noticia», reconoce. Ella se define como usuaria «frecuente» de este servicio porque lo usa para desplazarse a la facultad.
Sin embargo, hay ciudadanos que utilizan este medio de transporte «de manera ocasional». Este es el caso de Vicente López, que este jueves alrededor del mediodía esperaba junto a su hijo por el autobús en la parada de la plaza de Pontevedra para ir hasta la estación de ferrocarril, en la que iba a coger un tren para ir a comer a Santiago.
«El coche no lo uso para nada, voy andando a todos los sitios que puedo y, cuando ya es un poco lejos, cojo siempre el autobús», reconoce. Este hábito hace que las bonificaciones en las tarifas «no influyan demasiado», aunque reconoce que «pagar menos siempre se agradece, así las recargas de saldo también duran más tiempo».
Domingo García está jubilado y ocupa las mañanas saliendo a caminar «unos 8 kilómetros». Después de la caminata opta por tomar el autobús para regresar a casa: «Cuando llega una hora prudente cojo el bus».
El hecho de que ahora cada viaje le cueste 12 céntimos, una «buena cantidad», no es decisivo para seguir cogiendo el autobús, ya que ya lo hacía con anterioridad a la implantación de estos descuentos.
Considera que «a alguna gente seguro que le anima a usarlo más», pero se aventura a ir incluso un paso más lejos. «Ya valía la pena ponerlo gratis», promueve. A ver si el Concello recoge el guante.