Los dos nuevos embajadores de la UDC: «Necesitamos un mayor acceso a becas para alumnos e investigadores»
A CORUÑA
Uno de sus centros de investigación, el CICA, elige a dos de sus científicos como nuevos representantes de la institución
24 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Los embajadores no solo lo pueden ser de un país, también de una institución científica. En este caso, del Centro Interdisciplinar de Química e Bioloxía (CICA) que la Universidade da Coruña (UDC) tiene en Elviña. El centro, que este año ha subido de categoría ya que por primera vez forma parte de la Rede de Centros de Investigación do Sistema Universitario de Galicia (Rede Cigus), ha elegido a sus dos nuevos representantes. Se trata de los investigadores Alejandro Criado Fernández y Érika García Cardesín. Sus publicaciones y su trabajo investigando y divulgando son el motivo de esta distinción.
«Para min foi unha sorpresa moi grande. Nunca recibira ningún premio. Con tanta xente neste centro, con moi bos científicos e neste ano tan especial, no que subimos de categoría no ámbito científico, o recoñecemento é unha honra», destaca Érika García (Sobrado dos Monxes, 1990), que forma parte de la plantilla de hasta 220 personas del CICA, en su caso, como investigadora predoctoral del grupo de Bioloxía Costeira, Biocost.
Está especializada en el estudio de las mareas verdes provocadas por las macroalgas en la Península y participa en un proyecto con lenguados en el Instituto Galego de Formación en Acuicultura da Illa de Arousa (Igafa). Un trabajo de campo que compagina con su faceta divulgativa, como miembro de la asociación UDCBigBang, creada por estudiantes de la universidad.
Descubrir y contar
Estas dos facetas han pesado a la hora de concederle la distinción. Con ella, será embajador este año Alejandro Criado Fernández, uno de los 15 Ramón y Cajal del CICA. «Somos un centro joven que está apostando por investigadores ‘‘jóvenes’’ y que ha dado un salto en los últimos años», describe Criado Fernández, natural de Vilalba y de 43 años.
Junto al también Ramón y Cajal Jesús Mosquera dirigen el grupo NanoSelf. «Queremos monitorizar en granjas el salto de virus, conocidos y desconocidos, de animales a humanos con un dispositivo de detección temprana cuyo componente protagonista es el grafeno», detalla Criado sobre el proyecto Flufet, donde coordina un consorcio internacional de siete entidades. Tienen una financiación de más de tres millones de euros y el respaldo del European Innovation Council.
En su equipo comenzaron siendo tres y ahora suman una decena. «En el CICA hay profesionales con proyectos de alto prestigio, como los europeos Starting y Consolidator Grant», remarca Criado, uno de los científicos con las publicaciones más exitosas del CICA. Fundado en el 2015, reúne a los principales grupos científicos de ciencias experimentales y de la salud de la UDC. Cuenta con más de 30 grupos de investigación y 70 proyectos en marcha. El 55% de su personal son mujeres.
Este 2024, por primera vez, el centro cuyos tres pilares son la biomedicina, la alimentación y seguridad y la nanociencia y los materiales avanzados, ha sido distinguido como singular por parte de la Xunta, con una asignación de 1,9 millones de euros. «Es un hito que nos permite dar un salto de calidad, especialmente, en términos de financiación. Tenemos la responsabilidad de formar estudiantes, para eso necesitamos un mayor acceso a becas para alumnos de doctorado e investigadores posdoctorales. Son la base del CICA», apunta Criado, y como es el caso de Érika.
El siguiente paso, que también defenderá como embajador, es el de la consolidación. «Para dar el salto de calidad, necesitas estabilidad, el gran problema de base, no solo aquí, sino a nivel estatal», concluye el investigador.