Basura en las calles, ¿promoviendo una nueva pandemia?

José Luis Fernández Trisac PEDIATRA DEL CHUAC

A CORUÑA

CESAR QUIAN

La acumulación de basura en las calles no solo es un problema estético; puede favorecer la propagación de enfermedades y potencialmente desencadenar una pandemia

19 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Días atrás, mientras paseaba por el centro de la ciudad, me llamó la atención ver a una persona atravesando una pirámide de cartón cubierta de todo tipo de desperdicios para acceder a una máquina de tiques de la ORA. Observé detenidamente lo que pisaba y no pude evitar imaginar esos residuos entrando más tarde en su casa.

La acumulación de basura en las calles no solo es un problema estético; puede favorecer la propagación de enfermedades y potencialmente desencadenar una pandemia. Es bien sabido que los residuos, especialmente los orgánicos, generan un ambiente propicio para la proliferación de bacterias, virus y hongos patógenos que, si no se controlan, pueden causar enfermedades graves. Otra razón para una eventual nueva pandemia es el aumento de plagas asociadas con la acumulación de basura; así, la materia orgánica en grandes cantidades atrae a ratas, gaviotas, moscas, mosquitos, cucarachas..., que son vectores para la transmisión de enfermedades infecciosas. Los lixiviados de la basura, altamente contaminantes, pueden filtrarse al subsuelo y contaminar las fuentes de agua, tanto para consumo humano como para el medio ambiente. Esta contaminación puede llegar a nuestros hogares y afectar gravemente el medio ambiente, incluyendo los ecosistemas marinos.

Las pandemias no siguen en general un patrón temporal regular y su ocurrencia puede variar significativamente. Aunque es impredecible cuándo surgirá la próxima, debemos concentrarnos en detectar y controlar brotes emergentes lo más pronto posible, así como evitar condiciones que favorezcan la propagación de enfermedades.

Así, al reflexionar sobre la imagen inicial de una persona caminando sobre montones de basura en el centro de la ciudad, con sus zapatos de suela estratégicamente surcada para generar mayor adherencia, no puedo evitar pensar en las posibles repercusiones para la salud de esa persona y de quienes le rodean. Imaginando, por ejemplo, la entrada en su casa, pisando las alfombras donde su hijo lo recibirá con un simpático e incipiente gateo. Quizás unos días después tengamos a un bebé ingresado por una infección bacteriana invasiva y con serias repercusiones para su salud.

La acumulación irresponsable de basura en las calles no solo afecta negativamente la estética urbana, sino que también representa un riesgo significativo para la salud pública. Esta situación podría contribuir al surgimiento de enfermedades que podrían alcanzar dimensiones pandémicas. Es crucial implementar medidas urgentes para gestionar adecuadamente los residuos urbanos y asegurar la limpieza y seguridad de nuestras ciudades. Ignorar este problema no solo compromete nuestro entorno inmediato, sino que también podría tener consecuencias devastadoras para la salud global en el futuro. Los responsables de esta acumulación podrían ser inadvertidamente catalizadores de problemas de salud pública, potencialmente podrían desencadenar la próxima epidemia o pandemia.