Rehabilitaciones y cambios de tejado centran las obras en Educación en la provincia de A Coruña

Si una persona acudiera hoy al centro educativo donde estudió, lo más probable es que se encontrara un edificio cambiado respecto a cómo lo recordaba en su infancia. La realidad es que el patrimonio inmobiliario de la Consellería de Educación en la provincia de A Coruña precisa de una intervención para modernizar sus instalaciones a las demandas formativas actuales. «O contexto de todas estas actuacións é a folla de ruta que nos marcamos co que denominamos plan de Nova Arquitectura Pedagóxica. Este plan nace no 2021 e xorde das aprendizaxes que nos deixou a crise sanitaria e das necesidades que detectamos respecto ás infraestruturas. Repensamos os espazos educativos para que foran máis saudables, accesibles e que estivesen preparados para as novas metodoloxías do século XXI, que se caracterizan pola transformación dixital», explicó Manuel Vila, secretario general técnico de la consellería de Educación.

28 trabajos en marcha

Las 107 obras puestas en marcha desde el 2021 son variadas: van desde rehabilitaciones integrales, ampliaciones e incluso de nuevos centros «que estamos licitando en zonas urbanas e periurbanas que precisan de novas prazas educativas. Pero tamén outro tipo de actuacións como melloras sectoriais, cambios de cubertas, moi importante a eficiencia enerxética, a accesibilidade aos centros. Son inmobles de moitos anos e que requiren dunha intervención tan profunda como a que estamos realizando», detalla Vila. En este aspecto, el Ejecutivo gallego ha finalizado ya 66 trabajos en centros. Pendientes aún quedan las 28 que se están ejecutando en estos momentos y las 13 restantes que están licitadas y adjudicadas.

En casos como el IES Eusebio da Guarda, una de las 22 actuaciones que están comprometidas para hacer a medio plazo, hay que añadir a los criterios de eficiencia el valor histórico. «Os centros educativos son memoria viva da historia das cidades. A maioría deles parten dos anos 70, pero hai moitos que son edificios históricos. Estes necesitan unha intervención máis detallada porque teñen unha protección patrimonial que fai que as actuacións teñan que ser acordes coa historia do centro e cos requirimentos dese patrimonio. Calquera destas actuacións son moi profundas e de gran investimento. Todos sabemos a deriva que tiveron os prezos e a escaseza de materiais dende o 2021. Todos os orzamentos foron á alza. Calquera destas intervencións de ampliación ou rehabilitación custan, como mínimo, entre un e dous millóns de euros. As ampliacións oscilan entre os dous e os catro millóns. Son intervencións moi fortes», afirmó Manuel Vila.

No obstante, en la mayoría de los casos, las intervenciones más urgentes están vinculadas a los tejados y al cambio de ventanas e iluminación. «Son peticións moi demandadas en todos os centros porque están moi vinculadas ao benestar do centro. Cambia radicalmente a vida dun colexio cando cambias as ventás, revisas a iluminación e mudas as cubertas», resaltó el secretario general.

La instalación de placas fotovoltaicas también es otra línea de actuación que se hace en la provincia. «Realizamos máis de mil actuacións dende o 2021 cun orzamento duns cen millóns de euros. Ademais, hai 20 proxectos para colocar placas en IES e centros de FP porque son grandes consumidores de enerxía. Polo tanto, este investimento permitirá unha rebaixa que moitas veces está entre o 40 e o 50 % de aforro enerxético», recalcó.

«Llevábamos ocho años solicitando el arreglo o la sustitución del tejado, ya que era de uralita»

Sus puertas, al igual que en otros centros educativos de la provincia, se abrieron la semana pasada acompañadas de andamios. «En estos momentos tenemos algunas zonas del centro que están cerradas por la tarde. No se puede pasar por ellas porque es dónde están haciendo tareas que impedirían asistir a clase. Por suerte, en ese horario no nos perjudica, salvo los martes, que no lo hacen, porque no tenemos alumnado en esa zona en concreto. Luego están trabajando los sábados los días que hace falta», explicó Rafael Menéndez, director del IES Fernando Wirtz Suárez. En su caso, detalló, han cambiado algunos cursos de aula por temas de ruido en la zona del tejado en la que están trabajando.

La previsión era que la intervención finalizara con el inicio del curso escolar, «pero las obras comenzaron a finales de julio porque hubo un problema con una licencia municipal. Hubo un retraso de tres semanas», señaló Menéndez. «De momento no tenemos ninguna queja por parte de los padres. Hemos informado a todo el mundo de que desgraciadamente las obras se han retrasado y que vamos a tener que convivir con ellas durante un tiempo. Tampoco les hemos dado fechas porque no las sabemos», añadió.

En su caso, la actuación consiste en el cambio de los dos tejados del instituto coruñés. «Llevábamos ocho años solicitando el arreglo o la sustitución, ya que era de uralita. En realidad ya están los dos cambiados en un 95 %. Falta el tema de las bajantes, canalones, y cosas por el estilo. Tenemos ahora un tejado de los pequeños del edificio anexo que dicen que lo rematarán en un par de días. Pero luego todo esto lleva otro tipo de obras. La intervención incluye la reparación y pintado de todas las fachadas del centro y también la instalación de una pérgola que ya teníamos muy deteriorada. La desmontaron en julio. Permite el paso entre los dos edificios que tenemos, sin mojarnos», afirmó Rafael.

Ahora les toca compaginar las lecciones con los taladros y martillos. «No es sencillo. En la obra hay un coordinador de seguridad que se reúne con nosotros. Él organiza y da las instrucciones de cómo tienen que ser los andamios, dónde se tienen que colocar y dónde no, qué zonas tenemos que cerrar en determinado momento y así estamos trabajando. Colaborando entre ambas partes».

El director confía en que el tejado nuevo solvente las filtraciones existentes y mejore el aislamiento del centro, «sobre todo de las plantas superiores».

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