Nace la Fundación Amador de Castro para respaldar a las personas con síndrome de Down y alzhéimer

La vida personal y profesional de Amador Castro se rigió bajo una frase: «Devolverle a la sociedad parte de lo que nos da». Con esas palabras en el recuerdo, la familia de uno de los empresarios más destacados de la historia reciente de Galicia ha puesto en marcha una fundación con su nombre para respaldar a las personas con síndrome de Down y alzhéimer. «Amador ha sido un ejemplo de compromiso social constante y discreto a lo largo de toda su vida. Él ha olvidado muchas cosas, pero nosotras tenemos grabados los valores que siempre inculcó a nuestra familia», señalan en una nota. Por eso, su mujer y sus hijas han querido seguir el camino que él fue marcando en todos sus años de actividad, una vida que fue interrumpida con el diagnóstico del alzhéimer en el 2015. La otra de las razones para impulsar esta fundación fue el papel de Sol, que «llegó a nuestras vidas para cambiarlas por completo y es una de las impulsoras del proyecto y la razón por la que uno de los fines de la fundación es la creación de oportunidades para las personas con síndrome de Down».

La Fundación Amador de Castro nace como un proyecto familiar y ha ido creciendo con el compromiso y la profesionalidad de todas las personas que la integran. Parten de dos fines fundacionales aparentemente muy diferentes entre ellos, pero que comparten un objetivo común: la creación de oportunidades y la mejora de la calidad de vida dando soporte, apoyo y acompañamiento global a las familias. 

Una vez constituida la fundación, la previsión es realizar en el mes de noviembre una presentación pública a administraciones, entidades vinculadas a ambos colectivos, así como representantes del ámbito social, asistencial y educativo. Y a partir de ahí, poner en marcha proyectos a largo plazo, en cuyo diseño trabajan ya los responsables de la entidad, combinados con un un programa de servicios y actividades. 

Desde la Fundación Amador de Castro trabajarán con el objetivo de cubrir las necesidades educativas y personales a lo largo de todas las etapas vitales de las personas con síndrome de Down. «Trabajar con ellos y por ellos, a favor de sus derechos, su autonomía y su participación plena en la sociedad es nuestro objetivo fundamental», señalan desde la dirección de la fundación, que fija como uno de los desafíos fundamentales trabajar en la inclusión educativa y la búsqueda de opciones que den salida no solo a un potencial o a un futuro empleo, sino a «un proyecto de vida pleno y de calidad en el que se respeten todos y cada uno de los derechos de las personas con síndrome de Down». 

Respecto al apoyo de las personas con alzhéimer, señalan desde la experiencia que «el diagnóstico cambia la vida de quién lo padece y de toda su familia, provocando un enorme desgaste emocional desde los inicios de la enfermedad hasta el periplo de las gestiones, los inevitables cambios en el hogar, en la organización familiar, la preparación constante o las consecuencias físicas y psicológicas para los cuidadores». Por tanto, las acciones que promoverá la Fundación se centrarán, principalmente, en programas de colaboración con las familias ofreciendo soporte, apoyo, asesoramiento y ayudas efectivas para mejorar la calidad de vida del cuidador y, en consecuencia, del paciente, en los momentos más difíciles.

Actividades 

Para la consecución de los fines que persigue la fundación se realizarán actividades y talleres para acompañar a niños con discapacidad intelectual para permitirles vivir experiencias que les ayuden a crear vínculos emocionales entre ellos y con la sociedad, pero también se ofrecerá atención y orientación a familiares, sobre todo en casos de personas sin recursos o en situaciones de vulnerabilidad personal, familiar y económica. Además, desde la entidad se promoverá el bienestar general y la inclusión social y laboral de niños y jóvenes con discapacidad intelectual congénita o adquirida y contribuirán a mejorar la calidad de vida de los enfermos de alzhéimer y de otras demencias que causan problemas con la memoria, el pensamiento y el comportamiento, sus familias y entorno. 

La colaboración con otras entidades sin ánimo de lucro pasa por poner en marcha becas de estudios, mercadillos solidarios, así como actividades para fomentar la inserción laboral o servicios de atención domiciliaria, teleasistencia, fisioterapia de estimulación o grupos terapéuticos para cuidadores y familias de enfermos de alzhéimer para proporcionarles conocimientos y técnicas que les permitan acompañar y estimular a los enfermos. 

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