Nuevas retenciones en el Quinto Pino, pero con menor incidencia que el lunes
ARTEIXO
La utilización de vías alternativas y la presencia de agentes de la Guardia Civil mitigaron los problemas de tráfico por el corte de la AG-55
21 oct 2015 . Actualizado a las 17:03 h.Tras la sorpresa del pasado lunes en el que la zona del Quinto Pino se convirtió en una auténtica ratonera de tráfico, los usuarios tomaron nota y ayer prefirieron utilizar otras vías para evitar sufrir nuevos atascos. Así, la tercera ronda se convirtió en una de las grandes alternativas para muchos usuarios, aunque también la carretera de Meicende, la de Bens e incluso la de Feáns. Todo con tal de no volver a sufrir el atasco kilométrico que se registró hace dos días.
Pero que los usuarios hubiesen tomado nota y evitasen circular por la AC-552, no significó que ayer no se registrasen retenciones en la carretera de Vilarrodís. Los atascos aparecieron en menor medida, pero también los hubo. Mitigados en parte también por la presencia de agentes de la Guardia Civil que regularon el tráfico en la rotonda del Quinto Pino.
Y es que la ausencia de efectivos organizando el tráfico fue una de las grandes críticas que realizaron el lunes los usuarios. De hecho, muchos denunciaron no haber visto ningún agente durante el tiempo que estuvieron parados haciendo cola. Es el caso de Noemí Morás, que criticó muy duramente la ausencia de policías encargándose del tráfico el pasado lunes. «Era previsible que iba a haber problemas de tráfico. Ayer [por el lunes] no había ni un guardia civil, ni un policía local en ningún sitio. Es vergonzoso», comentó Morás, quien reconoció que el lunes tuvo que abrir su negocio tarde por culpa del atasco. «¿Y a mí eso quién me lo paga?», dijo.
Pero lo que más indignó a la usuaria es que nadie se hiciera cargo de los problemas de tráfico del lunes. «Llamas al Ayuntamiento de Arteixo y a la Policía Local y te dicen que llames a la DGT y esta a Fomento. ¿A quién tengo que llamar? ¿A la ministra? Ese es el problema de este país, que aquí nadie tiene la culpa», explicó esta usuaria, que reconoce que aunque ayer hubo retenciones en la AC-552, «nada que ver con el lunes».
Cabe recordar que los cortes de tráfico de la AG-55 se prolongarán hasta este sábado a las doce del mediodía. Mientras tanto se aconseja utilizar la tercera ronda, conectando con la A-6 en Ledoño, para desplazarse a Arteixo, a pesar de ser el trayecto más largo. El recorrido es de 22,1 kilómetros, pero en circunstancias normales, se debería de tardar unos 20 minutos en llegar.
Por otro lado, el Concello de Arteixo ha solicitado a Fomento mayor presencia de la Guardia Civil para regular el tráfico en la AC-552 y que las obras en horario nocturno no molesten a los vecinos del Quinto Pino, que no pueden dormir.
Cinco días sin poder dormir y ahora sin alumbrado público
Imagínese que tiene que dormir con el ruido de una excavadora martilleando su cabeza durante prácticamente toda la noche. ¿Con que humor se levantaría? Seguro que un pitbull a su lado sería un caniche. Pues multiplíquelo por cinco porque esas son las noches que los vecinos del Quinto Pino llevan sin dormir por culpa del ruido atronador que producen las excavadoras de la adjudicataria de las obras de la autovía a Langosteira.
«Estamos así desde el viernes. Son excavadoras con martillo que se pasan toda la noche picando contra la roca y el puente viejo. Y ese ta-ta-ra-tá se te mete en la cabeza y no hay manera de dormir. Además, como pican sobre bloque de granito también notas las vibraciones. Estoy durmiendo en el salón. Cogí el colchón y me lo llevé para allí y a mi hija la instalé en una habitación interior. Mi mujer no pega ojo», asegura Rafael, vecino del Quinto Pino, que explica que la maquinaria deja de funcionar a las 23.00 horas y reinician los trabajos a partir de las 3.30 horas, y califica la situación de «un auténtico cachondeo».
Además del ruido de las picadoras a gran escala, también denuncian que no hay alumbrado público. «No tenemos luz en la rúa Buenos Aires, tampoco en la calle Victoria de Los Ángeles, ni en María Calas. El alcalde dice que es una metedura de pata de la concesionaria de la obra y lo arreglarán a lo largo de esta semana», añadió este vecino del Quinto Pino, un barrio que está más abandonado por las administraciones de lo que su nombre indica.