La pasarela peatonal de Sabón reabrirá en enero tras varios años de espera

Elena Silveira
elena silveira ARTEIXO / LA VOZ

ARTEIXO

CÉSAR QUIAN

Operarios municipales construyen un parque público con zona infantil en Vilarrodís

03 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La pasarela peatonal del cruce de Sabón volverá a estar operativa a partir del próximo mes de enero. Al menos esa es la previsión que maneja el Concello de Arteixo, ya que la apertura de este paso elevado depende de las obras que se acaban de iniciar a pie de pasarela. En concreto, los operarios municipales están construyendo en la parte de Vilarrodís un área de juegos infantiles y habilitando una gran zona verde.

Responsables municipales indicaron que, de esta forma, los peatones podrán cruzar por encima de la A-6 desde la zona de O Seixedo hasta Vilarrodís sin tener que ir andando hasta la rotonda de Sabón. «Pasarán de una área verde a otra», confirmaron. De hecho, ahora mismo, el brazo de la pasarela que parte desde Vilarrodís lo hace desde un lodazal y sin plataforma adaptada para que puedan acceder los peatones. Es decir, está intransitable. A partir de enero «se producirá un gran cambio en la zona», anunciaron desde el Concello de Arteixo.

Los trabajos para construir el nuevo parque público con área de juegos infantiles tienen un presupuesto de 225.000 euros y afectan a una superficie de 3.537 metros cuadrados. Portavoces municipales indicaron que el proceso fue lento y costoso debido a que se tuvieron que expropiar cuatro fincas y, además, el terreno es muy pantanoso y poco firme, por lo que el proyecto tuvo que adaptarse a las condiciones de las parcelas. «De hecho, la obra servirá también para drenar y hacer más salubre la zona», añadieron desde el gobierno local.

La pasarela peatonal, de 150 metros de longitud, comenzó a instalarse en abril del 2006 en una zona muy próxima a la rotonda. Siete años después se desmontó para construir el viaducto elevado sobre la rotonda. Tras años de abandono en una finca anexa, a finales del 2015 volvieron a recomponerse las piezas, unos trabajos que terminaron el pasado mes de febrero. Desde entonces, espera la llegada de peatones.