Detuvieron a un septuagenario y un veinteañero por suministrar a menores
08 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.«¡Señora, métase en casa!», indicaron a una vecina de la zona de O Roncón, en Cambre, que se despertó a las seis y media del día 29 tras el gran despliegue de efectivos de la Policía Judicial en una operación antidroga que la Guardia Civil desveló ayer, tras la detención de dos personas. «Isto parecía unha película, que estábamos no Bronx, había moitos coches e trouxeron os cans», explicaba una residente de este pequeño núcleo, que aseguraba que la zona fue tomada por los guardias.
O Roncón es una calle tranquila tras el consistorio cambrés y la vivienda en la que se realizó la redada, en el número 4, una casa unifamiliar de bajo y una planta, con un jardín lleno de macetas. Junto a la valla de acceso a la finca hay un cartel municipal que pide que se recojan los excrementos de los perros. Allí se presentaron de madrugada los miembros de la Policía Judicial, de Seguridad Ciudadana de la Comandancia y del servicio de perros de la Guardia Civil, en lo que denominaron operación Carecas. Esta investigación estuvo tutelada por el Juzgado de Instrucción número 3 de A Coruña, tras recibir información de la posible existencia allí de un punto de venta de drogas a menores.
Los vecinos veían el trasiego de jóvenes a la vivienda familiar de un hombre de unos 70 años, que llegó allí hace unos 14 años tras residir un tiempo en Canarias, pero lo vincularon con la presencia, durante bastante tiempo de un joven que fue presentado inicialmente como su hijo, aunque los vecinos creen que mantenían una relación sentimental. Ese joven, según los vecinos, dejó de vivir en la casa hace un tiempo, pero no sospecharon que el trasiego que había fuera por trapicheo. «O señor nunca deu un problema aos veciños, iso si, víamos chavalada e chavalada, pero nunca sospeitamos nada», precisaba otra residente en esta zona, que asegura que les extrañó un operativo tan grande para una operación antidroga.
La Guardia Civil, tras recabar pruebas, solicitó la autorización de entrada y registro en el domicilio. Los guardias entraron en la vivienda y se incautaron 138 dosis de hachís, cuatro básculas de precisión y objetos para preparar las dosis, como bolsas de plástico y herramientas de cortar. Tras incautarse de ese alijo, los guardias detuvieron al morador, que ingresó en un centro penitenciario como presunto autor de un delito contra la salud pública.
La operación Carecas se mantuvo abierta hasta que identificaron al supuesto proveedor del punto de venta desmantelado, un vecino de la localidad de 20 años de edad, al que también detuvieron.