La expansión en pandemia de María Fabeiro

M. Rodríguez A CORUÑA

CARRAL

Blas Dominguez Andrade

Triplicó los locales y la venta de comida preparada, con la ensaladilla como estrella, iguala a la de carne

08 nov 2021 . Actualizado a las 09:45 h.

«Hola, soy María Fabeiro. Mi ilusión es que disfrutes en tu hogar de cada bocado de mis platos y carnes. Con la máxima calidad y el sabor más auténtico. Para conseguirlo cuidamos desde el origen de cada ingrediente hasta el último detalle». Así se presenta en las redes sociales una mujer que empezó hace cinco años con una carnicería en el barrio coruñés de Os Castros. Antes de la crisis sanitaria, explica María Fabeiro, «no dábamos hecho» y por ello estrenaron local en Carral, «donde está el obrador de todo», detalla. Y siguieron creciendo: «En la pandemia abrimos en Monelos, por la demanda que teníamos. Es un despacho pequeño, al que ya le teníamos echado el ojo, que funciona muy bien». 

Que sus orígenes estén en Carral era una razón más que suficiente para ubicar allí «la cocina central, tanto para la preparación de las comidas como para la elaboración de los embutidos». Otros argumentos iban desde la conciliación familiar hasta las buenas comunicaciones pasando por las facilidades para abrir un negocio en la villa carralesa.

Comenta María que en estos momentos «tenemos tantísima demanda de comida preparada que entre los tres locales la mitad de las ventas son de carnicería y la otra mitad ya es de los platos preparados». Destaca que lleva cinco años con la venta de «comida preparada. La gente hace su pedido on line, lo recoge y luego calienta la comida en casa». A las nueve y media de la mañana en los expositores de los locales ya se puede ver el menú diario, que es donde eligen los usuarios. También en la redes sociales en las que María Fabeiro se mueve con agilidad.

Teniendo carnicería, parece que lo más habitual del menú serán los platos con carne, pero María desmonta esta premisa explicando que no es así: «Tres veces por semana tenemos pescado y luego también tenemos arroces, verduras ... Una variedad en la que hay siete u ocho referencias para poder elegir».

Pero para muchos usuarios no hay ninguna duda a la hora de la elección: «La cosa que más se vende es la ensaladilla, pero con una diferencia abismal sobre el resto de nuestros platos. En verano parece lógico pero ocurre lo mismo durante el invierno».

De todos modos, en la temporada invernal ofrecen también una amplia variedad de los «platos de cuchara, con mucho caldo gallego, fabada, callos... Los hacemos como en casa, como mi madre o mi suegra». Esta es una de las razones por las que ha ido aumentando la demanda de estos platos unido a que, apunta María, no siempre es fácil disponer del tiempo necesario para elaborar, por ejemplo, unos callos en casa.

Además, a la faceta emprendedora de esta mujer se une el hecho de que trate de ir añadiendo nuevos atractivos a las comidas que ofrece: «Empezamos con un montón de platos elaborados que estaban preparados para calentarlos en casa y en cinco minutos poder comerlos. Lo que hacemos es intentar introducir nuevos elementos para que a los clientes les resulte todo mucho más fácil», argumenta.

Entre esas facilidades para los usuarios está que en su página web es posible planificar los pedidos de las comidas para varios días, así como elegir entre ir a recogerla en cualquiera de los tres locales o el envío a domicilio.

Hasta el pasado mes de octubre eran nueve las personas que atendían estos locales pero una de ellas «se ha ido a emprender», algo que muy probablemente haya aprendido de María Fabeiro, como asume ella sin verbalizarlo, pero con una reveladora sonrisa.

Claro que ella tampoco para y ya está dándole vueltas a la puesta en marcha de algún nuevo proyecto vinculado a la carnicería. Quizá sea porque ni siquiera la pandemia ha podido frenar su expansión o porque, y es una curiosidad, los tres establecimientos de María Fabeiro están ubicados en avenidas: Avenida Mártires 30, en Carral, Avenida da Pasaxe 17, en Os Castros, y Avenida de Monelos 115.