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«Las gaviotas vuelven a sonar con fuerza y me molestan cuando estoy durmiendo»

La Voz

A CORUÑA CIUDAD

21 mar 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Una invidente de oído fino como Luisa Rodríguez eliminaría del paisaje sonoro de la ciudad los cláxones de los coches y las motos. «Me taladran los oídos y es el ruido más desagradable que se puede escuchar en A Coruña», explica esta residente en la calle Villa de Negreira, y que tiene la zona de la calle Barcelona como uno de sus principales ámbitos vitales. «Todo cambia cuando uno se adentra en la calle Barcelona. Ahí predominan los juegos de los niños y la gente paseando», argumenta sobre las bondades que para el paisaje sonoro tiene la peatonalización de una calle.

Otro de los sonidos que mandan en la zona de Luisa son las gaviotas: «A veces por la noche me molestan cuando estoy durmiendo. Habían disminuido en los últimos años, pero últimamente han vuelto a sonar con mucha fuerza».

Otro de los ruidos que molestan a Luisa -y en general a los invidentes consultados para este reportaje- son las conversaciones cruzadas en grupo. «A mí me aturden», reconoce. Sin embargo, otros sonidos que también se escuchan en la ciudad como las señales acústicas de los semáforos para invidentes no se escuchan tanto como Luisa querría. «Deberían ser todos parlantes», señala de forma taxativa una Luisa que tiene en los olores otra fuente de información para situarse en la ciudad.