Carecía A Coruña de un estudio serio sobre su propia importancia como puerto jacobeo. O al menos no era accesible para la ciudadanía. Pues ya lo tiene. Y firmado por alguien tan reconocido en el mundo de las peregrinaciones a Santiago de Compostela como el experto Manuel Rodríguez.
El libro, de 66 páginas de fácil lectura porque muestra una maquetación muy ágil y que divide el texto en pequeños apartados, es en realidad una iniciativa de Turismo de Coruña, con una persona al frente -Lanzada Calatayud- que desde el primer día se empeñó en explorar esa vertiente que la ciudad tenía realmente olvidada. De manera que este es un primer paso.
En realidad, un segundo paso. El primero fue recorrer el Camino metro a metro, hace unos meses, guiando a un nutrido grupo de presidentes de asociaciones de amigos de la ruta jacobea. Y de todo el mundo, desde Japón a Canadá. Un buen golpe de efecto.
Pero hacía falta recuperar la historia. La ciudad había ido perdiendo la memoria por varias razones, desde el poco cariño hacia los ingleses que se había instalado en el subconsciente colectivo (episodio de María Pita) hasta el injusto olvido por parte de la Iglesia católica, que erre que erre ha seguido negando hasta este año la compostela a quienes peregrinaban desde aquí por la sencilla razón de que la distancia recorrida era inferior a los cien kilómetros preceptivos. Como decía el entonces alcalde Paco Vázquez, «como no mandemos a los peregrinos 30 millas mar adentro y que luego vuelvan, no sé cómo esperan que hagamos».
Esa recuperación de la historia está sobre la mesa. Quizás sea hora de recuperar también la vieja tradición coruñesa de ir a abrazar al Apóstol. No en Compostela, no. En la iglesia de Santiago. Palabra de Manuel Rodríguez.