Iván Ares cede el volante y coge la pizarra en el rali de A Coruña: «Paso más nervios así»

A CORUÑA CIUDAD

Nacho Carballeira

El laureado piloto ejerció ayer de jefe de equipo y asistente de sus mecánicos en el Ares Racing

29 feb 2020 . Actualizado a las 23:40 h.

Bulle la asistencia del Ares Racing. Los vehículos todavía no han llegado, pero la actividad es intensa y el cátering de Loxisco prepara bocados de energía para los pilotos, ya de camino después del primer bucle. Y, de pronto, emerge la figura de Iván Ares (con el Nacional y el Gallego en su palmarés), recogiendo un toldo... Un momento... ¿Iván Ares? ¿Y qué hace, que no se encuentra al volante? Pues porque esa opción no pudo cerrarla a tiempo, tras vender su Hyundai I20 R5 con vistas a su participación en el Campeonato de España y, posiblemente en el Supercampeonato y el Europeo.

De este modo, Ares se intercambió los papeles con los integrantes de su asistencia e hizo de mecánico para sus mecánicos, ayer pilotos. «Estamos haciendo labor de jefe de equipo, organizando la asistencia, seguimiento a los pilotos en las metas, elección de neumáticos, hablando con los mecánicos para que preparen lo necesario y viviéndola desde otra perspectiva, desde el corazón del equipo», resumía el deportista de Cambre.

«Alberto Otero participa con el que era mi Hyundai, Santi García va con el R2. Y me intercambié los papeles con Jorge Bergondo (que está disfrutando del rali con mi primo Rubén Roel como copiloto) y Daniel Orgeira, dos compañeros del equipo que normalmente son mecánicos. No pilotan nada mal. Y un empleado del taller, Iván Bergondo, está corriendo en otro coche como copiloto», repasa.

Sin embargo, acostumbrado a dominar el pulso entre curva y curva, Ares confesaba: «Paso más nervios así, estando pendientes de todos ellos, al final es un poco lío, pero lo disfruto porque además es al lado de casa». «Lo estoy pasando muy bien, sobre todo por la buena actuación de Alberto Otero, que corre con mi Hyundai peleando por el podio», decía.

El piloto Santi García recogía el guante: «Seguro que es complicado para él no poder correr en A Coruña así que le agradecemos el apoyo». «Los tramos son complicados y había que apretar para no dejarle quedar mal. Ha estado haciendo un buen trabajo y hay que darle las gracias», concluyó.