
Los servicios de desratización actuaron ayer en la Segunda Fase de Elviña, que no es de las zonas de la ciudad más afectadas por la plagas
13 ago 2021 . Actualizado a las 11:57 h.Mientras dos trabajadores de la empresa de control de plagas Andrade iniciaban sus labores en la calle Pablo Picasso, de Elviña, un hombre mayor que paseaba por la zona exclamaba: «Hai ratas a montóns nesta zona, polas rúas e nos patios!»
El servicio de desratización acudió al lugar tras el aviso de algunos vecinos, que identificaron como focos del problema la parada de bus cercana al túnel de la avenida Enrique Salgado Torres, el pasadizo que va de la calle Álvaro Cunqueiro a la plaza de Luis Seoane y la calle José Luis Bugallal Marchesi. «Las ratas van por temporadas, pero siempre han estado aquí», explica una de las trabajadoras de un negocio localizado junto al pasadizo.
Los avisos de emergencia por plagas suelen ser transmitidos por la ciudadanía a través del 010, pero también se puede alertar mediante una queja al departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de A Coruña. Pero no se atienden este tipo de cuestiones puntuales, es imprescindible el trabajo preventivo. Adrián Andrade, responsable de la empresa subcontratada por el Concello de A Coruña, explica cómo se desarrolla el mantenimiento de control de plagas. O lo que es lo mismo, la vuelta a la ciudad en 7.000 tapas de alcantarillado e instalaciones eléctricas. Los puntos revisados son marcados con manchas de pinturas, que suelen pasar desapercibidas entre la población.
El alcantarillado, el inframundo de la ciudad, es donde se origina el problema que después sale a la superficie. El inframundo de la ciudad es desde donde, por lo general, los servicios municipales actúan. Pero no siempre es posible. En casos como el de la Segunda Fase de Elviña, un foco del problema proviene de un semisótano que tiene un montón de accesos para las ratas debido al deterioro del perímetro del edificio. «A nivel municipal no se cubre la desratización de ese bloque, pero alrededor de él hay más puntos de control que en ninguna otra zona de la ciudad», explica Andrade. Aunque los cebos de control son seguros, se intenta minimizar el número.
Desde la Concejalía de Medio Ambiente del Concello de A Coruña alertan de que las ratas «no respetan las líneas entre lo público y lo privado», porque la presencia de ratas en un edificio particular puede afectar a la vía pública y viceversa.
¿Dónde hay más ratas?
Monte Alto es la peor zona por la antigüedad y estructura del alcantarillado. «Cuando empezamos era la que tenía una peor situación pero, sorprendentemente, ahora está muy controlado», explica Adrián Andrade, «era controlable, aunque no de forma fácil». En el barrio de las Flores el problema ya no era solo el alcantarillado, también la alimentación de los gatos, a los que algunos vecinos les dejan comida en muchos puntos. La siguiente zona con una mayor afectación es en Agra do Orzán, donde no tenemos una referencia de alimentación de animales ni tampoco tiene un alcantarillado especialmente antiguo, por lo que lo relacionamos con la densidad de población.
