Feijoo se compromete ante los profesionales del complejo hospitalario a que en tres años estarán rematadas el 80 % de las obras
22 mar 2022 . Actualizado a las 11:35 h.El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, se comprometió este lunes a que el 80 % del Novo Chuac estará construido en el plazo de tres años. Lo hizo en el salón de actos del propio Hospital de A Coruña, donde lo recibieron miembros de la comisión de centro y de la plataforma de afectados por las expropiaciones que se oponen a un proyecto que supondrá pasar de 85.000 a 255.000 metros cuadrados de superficie construida en la ladera de As Xubias de Arriba. El propio Feijoo describió el alcance de la iniciativa apoyándose en las medidas deportivistas: «Como 25 campos de Riazor, e aínda sobrarían metros para un campo de adestramento», dijo el titular del gobierno gallego.
No faltaron a la presentación del proyecto básico los conselleiros de Sanidade Infraestruturas, Julio García Comesaña y Ethel Vázquez, ni tampoco la alcaldesa Inés Rey, que aplaudió el arranque de una actuación que, según subrayó, «salda unha débeda con esta área sanitaria», y reafirmó su compromiso para que llegue a buen puerto: «O goberno municipal non porá excusas nin atrancos, a Xunta terá sempre un aliado comprometido nas políticas de progreso para a maioría», subrayó la regidora. No en vano, recordó que el Ayuntamiento aportará una parcela y financiación por valor de 26 millones de euros para las expropiaciones y la construcción.

Tal y como recordó el gerente del área sanitaria de A Coruña, Luis Verde, el plano de la colina de vistas privilegiadas sobre la ría comenzará a sufrir una profunda transformación justo cuando se cumplen 50 años del actual Chuac. El futuro Novo Chuac, añadió Feijoo, deberá dar respuesta a las necesidades asistenciales, docentes y de investigación de la población para otro medio siglo más. De ahí el calado de una obra que, además, es «extraordinariamente complexa», indicó, pero que dará forma a un «centro de referencia en Galicia, por suposto en España e tamén no conxunto das rexións europeas»,valoró. Con 430 millones de inversión autonómica, también situó al futuro complejo sanitario público como el proyecto más ambicioso de los impulsados por el ejecutivo que preside.

Con una arquitectura cuidada y adaptada a un modelo asistencial que integrará alta tecnología y en el que ganará peso la atención ambulatoria a través de la cirugía sin ingreso, los hospitales de día y las unidades multidisciplinares, el cronograma del Novo Chuac prevé que en justo después de finalizar la actual reforma que se está llevando a cabo en parte de los inmuebles ya existentes, la denominada fase cero, a finales de este año se liciten los trabajos para la fase 1, que comenzará en el primer trimestre del 2023. Y, con ella, el grueso del proyecto. En ese momento empezará a tomar forma el nuevo hotel de pacientes, que se levantará en la parte superior del actual Hospital A Coruña, y comenzarán también los trabajos para el nuevo viario y los accesos, para cuya agilización se demolerá el actual hotel de pacientes.

En paralelo, se construirán los párkings subterráneos con capacidad para 2.600 vehículos y la mayoría de las nuevas edificaciones que, a modo de escalera, se irán erigiendo flanqueando un jardín bioclimático central que esponjará una especie de pasillo central con el actual complejo. En total y sobre unos terrenos de 115.000 metros cuadrados (la parcela ocupada ahora tiene 54.000), serán 140.000 metros cuadrados de obra nueva, al margen de los 30.000 para estacionamiento subterráneo.
En la zona más próxima a Eirís se abrirá una gran plaza central básicamente peatonal, aunque se permitirá la entrada del transporte público y de los vehículos particulares para recoger y dejar pacientes. Ahí se ubicará la entrada principal del edificio, que se abrirá en un gran vestíbulo a doble altura donde se ubicará, entre otros servicios, la cafetería, capillas y locales comerciales.

Aunque de forma exenta, también en la zona más elevada del solar se construirá el pabellón dedicado a docencia e investigación, que conectará con el hospital a través de una pasarela o finger elevado. Descendiendo por la ladera, se irán concatenando diversos bloques escalonados, por los que pacientes y profesionales podrán transitar a través de escaleras mecánicas.
Cuando finalice esta primera fase, en el 2025, todavía quedarán dos años más de obras para construir, en la zona más próxima a la avenida de A Pasaxe, el último bloque previsto, que se dedicará a consultas externas, y el proyecto finalizará con una tercera fase centrada en la renovación interior y exterior de las edificaciones de lo que hoy es el Chuac.
Cuando el Novo Chuac sea una realidad, contará con un 15 % más de camas que ahora, hasta las 1.500, tendrá un 50 % más de habitaciones individuales, y un 108 % más de puestos de Urgencias. Junto a todo ello, dispondrá además de 500 consultas externas, 40 quirófanos, 230 puestos en hospitales de día y 45 estaciones de diálisis.

Manuel Vázquez Muíño, presidente de la ute Pinearq-Vázquez Muíño-Monteoliva, que desarrollará el proyecto, esbozó para los asistentes las principales características de una arquitectura que, a simple vista, destacará por la creación de un gran patio o jardín que actuará de bisagra entre los nuevos bloques y ya los existentes.
De forma intencionada, en el diseño se primará la integración en el paisaje, de ahí que se haya optado por una propuesta de inmuebles escalonados, de forma que todos ellos tengan vistas sobre la ría, todas las habitaciones de ingreso reciban luz solar y cada nuevo bloque cuente con áreas ajardinadas alrededor.
En la misma apuesta de sostenibilidad, se buscará la eficiencia energética de las edificaciones a través de paneles fotovoltaicos, instalaciones de biomasa y geotermia.«Todos los materiales serán, en la medida de lo posible, reciclados y reciclables y de kilómetro cero» subrayó, y señaló también el protagonismo que se dará en los interiores a la madera de origen gallego para favorecer la confortabilidad y calidez de los espacios.
Debido a las magnitudes que tendrá el complejo, la obra servirá también para resolver los problemas de accesibilidad y circulación en el entorno, ya que se construirá un anillo perimetral de dos carriles en sentido único que conectará con la AC-12 con una rotonda elevada y también con las zonas de Eirís y Monelos para diversificar los accesos. En paralelo se establecerán además recorridos peatonales y también carriles bici que, según anticipó el presidente de la Xunta, no se descarta lleguen a comunicar el hospital con la futura intermodal.
Con esta intervención viaria se facilitará además la distribución de los usuarios, ya que se diferenciarán las distintas entradas en función de las actividades que llevarán a la población hasta el futuro complejo hospitalario: la entrada principal al área de hospitalización estará situada por Eirís, a la altura de la sexta planta, mientras que a Urgencias se entrará por una plaza propia en la parte izquierda y al nivel de la segunda planta, el acceso a consultas externas se ubicará al nivel del bajo, en la parte más próxima a la avenida de A Pasaxe, y para acudir a servicios como rehabilitación se deberá tomar otra puerta, a la altura de un séptimo.

PLATAFORMA DE AFECTADOS
La plataforma de afectados por las expropiaciones para el Novo Chuac recibió ayer al presidente de la Xunta a las puertas del hospital. Con pancartas, el colectivo manifestó su malestar por el proyecto y reiteró su aplauso a la construcción de un nuevo complejo hospitalario, pero en otra ubicación. Con los eslóganes de «Novo Chuac sí, pero non así» y «Chuac sí, pero non aquí», reiteraron los argumentos en contra de una actuación en una parcela de difícil acceso, con barreras para personas con movilidad reducida y tomando como base un inmueble que ya cumple 50 años desde su construcción, por lo que consideran que los 430 millones de euros que se prevé costará se destinarán «só a parchear un hospital vello», y supondrán años de obras para llevar a cabo una concentración de servicios, entre ellos los que ahora se prestan en el Oncológico y el Materno, que consideran «ineficiente». A ello se añade, según recalcaron, el hecho de que «máis de 40 familias van a ser desaloxadas das súas vivendas, ser ser escoitadas nin recibir ningunha información». Frente al proyecto presentado, la plataforma de afectados, de la que forman parte profesionales del propio Chuac, reivindican un hospital nuevo para la ciudad como se ha llevado a cabo en otras ciudades de Galicia en un emplazamiento alternativo y más accesible.
Feijoo, increpado por un miembro de la comisión de centro del Chuac por iniciar su discurso en castellano y también por los miembros de la plataforma de afectados cuando abandonaba el hospital, aseguró en su intervención que se habían analizado sin éxito otros emplazamientos y también subrayó que se buscará el mejor emplazamiento para los afectados por las expropiaciones. Aseguró además que se buscará que la construcción tenga el menor impacto posible sobre las viviendas de los vecinos de Eirís.