Este miércoles comenzó la temporada de baños vigilados, incorporando las aguas frente a La Solana como novedad
15 jun 2022 . Actualizado a las 12:30 h.El clima no acompañó durante el día de ayer, puesto que una densa niebla se instaló en A Coruña. Sin embargo, esto no impidió que los servicios de socorrismo comenzasen la temporada de baño vigilada, que estará vigente hasta el próximo 15 de septiembre. La gran novedad es que O Parrote está incluido en la lista de las zonas controladas por los servicios de salvamento, dentro de la que se encontraban ya las playas de la ciudad.
Este fue un tradicional punto de encuentro para muchos coruñeses hasta que las autoridades prohibieron el baño en el 2019. Por ello, los antiguos usuarios de O Parrote no quisieron perderse la inauguración. De hecho, llevaron una botella de champán para brindar por su logro, puesto que fueron ellos quienes recogieron las firmas para instar al Concello a que habilitase la zona.
«Empecé a bañarme en O Parrote hace 50 años», narró Carlos Brea, uno de los que se acercaron ayer a la zona. La razón de acudir allí en vez de a una playa es «porque es más limpio, ya que no tienes que lidiar con la arena», comentó.
Muchos de los que solían frecuentar el lugar se mostraron satisfechos con la decisión de la Administración de Inés Rey. María del Carmen Más indicó que se siente «más segura» al contar con dos socorristas que vigilan. «Te da más confianza y nadas más tranquila porque si te pasa algo hay gente controlando», añade esta mujer que hace ya años que empezó a acudir a bañarse a este lugar.
Los tradicionales de O Parrote
Carlos Brea llevaba tanto tiempo frecuentando O Parrote como zona de baño que conoció a muchos de los que hoy en día considera sus amigos. Entre ellos se encuentran Rosa Sánchez, Cruz Rivera, María del Carmen Más o Emilio, otros usuarios que también estuvieron presentes durante la inauguración. De hecho, Sánchez fue una de las personas que impulsó la recogida de firmas para pedir al Concello que habilitase el baño. Aseguró que «cuando pusieron el cartel de prohibido fue horroroso».
Rosa Sánchez solía acudir a O Parrote todos los fines de semana, algo que tuvo que interrumpirse por el cese del baño. Echando la vista atrás, recuerda cuando «el mar llegaba a lo que ahora se ha convertido en el muro de La Solana». «Yo me crié en la plaza de España y recuerdo la playa que había aquí», dijo Sánchez. El lugar le trae grandes recuerdos puesto que «son muchos años, costumbres y amistades».
Por otro lado, Carlos Brea cuenta que hace unos años jugaba en el Imperator y que solían ir a bañarse a O Parrote después de cada partido de fútbol. Y es que este lugar solía ser muy utilizado por atletas de la ciudad. «Aquí venía mucha gente después de hacer deporte porque cuando metes los músculos en el agua sales como nuevo», comentó Brea.
Todos ellos, que son amigos ya desde hace mucho tiempo, quisieron rememorar algunas de las anécdotas que vivieron en este lugar. «Solíamos lanzarnos desde donde ahora está el límite de La Solana», comentaba uno de ellos. Y es que antiguamente la zona era un arenal al que acudían muchos coruñeses. Haciendo referencia a ello, Brea cree que «deberían traer arena como la de O Pedrido para recuperar la playa de O Parrote». Después de tantos años, los usuarios de la zona vieron a muchos acudir a bañarse. Es el caso del antiguo jugador del Deportivo Dagoberto Moll, que a sus 95 años sigue frecuentando la zona, aunque ayer no quiso meterse en el agua como consecuencia de la brisa y la niebla que había.