El pleno de A Coruña da luz verde a la firma del convenio de expropiaciones para el Novo Chuac
A CORUÑA CIUDAD
El Gobierno gallego pide concreción presupuestaria y el inicio de las obras sigue en el aire
28 dic 2022 . Actualizado a las 23:40 h.El pleno de A Coruña aprobó este jueves en una sesión extraordinaria y urgente firmar con la Xunta el convenio para obtener los terrenos necesarios para la construcción del Novo Chuac, un documento que afecta especialmente a la parcela donde se levantará la torre polivalente, y a los nuevos acceso viarios. Aunque con muchas puntualizaciones y reproches, el punto salió adelante con el voto a favor del PSOE y el PP, ya que se abstuvieron BNG, Marea Atlántica y la concejala no adscrita Susana Soneira, y votó en contra la otra edila no adscrita, Isabel Faraldo. Pese a la aprobación, el arranque de las obras del Novo Chuac sigue en el aire por las diferencias entre Xunta y Ayuntamiento sobre la concreción presupuestaria del convenio. Por ahora, lo probable es que médicos y usuarios del hospital tengan que seguir esperando por una infraestructura esencial.
El concejal de Urbanismo, Francisco Díaz Gallego, recordó que el 1 de marzo del 2021 se firmó el convenio marco que establece las bases para construir el nuevo complejo sanitario, y que era necesario elaborar y firmar otro entre ambas Administraciones para la tramitación de la obtención de los terrenos y para los accesos, con el compromiso de que el Ayuntamiento aportará 22,2 millones a ese fin.
Sin presupuesto
Sin embargo, tras la aprobación ayer en el pleno, el portavoz del grupo municipal del PP, Miguel Lorenzo, indicó que en este convenio falta «el famoso papelito» que les reclama la Xunta, es decir, el compromiso presupuestario. «El presupuesto para el 2023 no se aprobó, ni un modificativo de crédito que incluya estas partidas. Manden el compromiso presupuestario para poder iniciar la tramitación. Están volviendo a vender humo el día de los Santos Inocentes. Dejen de dar palos de ciego, porque esto que se aprueba, en el fondo, no vale para nada. Cuando se apuesta por la sanidad pública hay que empezar por las infraestructuras», añadió.
Personal y servicios
En el turno de réplicas, el concejal de Urbanismo quiso dejar claro que el informe del interventor municipal confirma que en el convenio «constan las anualidades» y, a pesar de que Miguel Lorenzo dice que no hay consignación presupuestaria y que sin ella no se pueden iniciar las expropiaciones ni las primeras demoliciones, «en el cronograma de la Xunta aparece que es necesario tener el proyecto sectorial de interés autonómico en el 2022. Y sin él no hay Novo Chuac. A ver si son ustedes los que no están haciendo nada y se están inventando excusas».
Gallego indicó que por esta misma regla de tres, sin consignación presupuestaria tampoco la Xunta hubiera podido iniciar las obras de la estación intermodal. «Porque allí también falta ese papeliño al que usted se refiere, y las obras están en marcha». El concejal de Urbanismo pidió al PP que «no busque el conflicto» y que como dijo estos días la alcaldesa, los encontrarán «para el diálogo y el trabajo conjunto, no para el enfrentamiento».
Tampoco dejó pasar la ocasión para comentar que espera que la Xunta no repita con el Novo Chuac lo de la pasarela sobre la ría. «Ayer me dijeron que ya no les interesaba. Espero que no nos hagan lo mismo con el hospital», reprochó. Y pidió a Lorenzo que le diga a la Xunta que remate trámites pendientes, como el proyecto de urbanización o el proyecto urbanístico del hotel de pacientes, y que tengan en cuenta que el Novo Chuac no es solo el continente, sino también su contenido.
La concejala María García, de Marea Atlántica, señaló que el Ayuntamiento tendrá que hacer más desembolsos: «Auga, saneamento, cesión de parcelas, bonificacións fiscais e ouros ingresos que o goberno deixará de ingresar». Aclaró que no están en contra de la ampliación del Chuac, pero no queda claro qué pasará con los presupuestos y las reglas de gasto en los próximos años. «E investir 400 millóns de euros non acabará co desmantelamento da atención primaria, coas condicións inhumanas nas que traballa o persoal sanitario».
El BNG también justificó su abstención. La concejala Avia Veira criticó al gobierno municipal por sus cambios constantes de opinión en cuanto al proyecto del Novo Chuac y, aunque no se oponen a la nueva infraestructura, creen que «non é prioritario un envoltorio, senon a ampliación da carteira de servizos e máis persoal». «Irán 400 millóns para o novo hospital, pero agora mesmo non hai servizo de tarde nos centros de saúde, os profesionais de primaria teñen o cupo supradimensionado, os COF están infradotados, non hai dotación suficiente para saúde mental, dental...» Y añadió que solo el Ayuntamiento de A Coruña hace aportación económica para una infraestructura que utiliza todo el área.
La no adscrita Susana Soneira puntualizó que el Ayuntamiento compromete 12 millones para la expropiación de terrenos y, el resto, para las conexiones viarias. «Pero por que o Concello ten que participar nunha inversión que é competencia da Xunta?». Isabel Faraldo, también no adscrita, aclaró que no se opone a la ampliación, pero que no es la ubicación más idónea: «Mala accesibilidade, un edificio bunkerizado en si mesmo que vai xerar sufrimento pola convivencia das obras e a actividade hospitalaria», dijo.
Y detrás de todo esto... las cuentas del 2023
En el trasfondo del último pleno del año, el protagonismo, en realidad, no lo tuvo la cárcel, ni el Novo Chuac. Lo tuvieron, en cada intervención de los grupos, los presupuestos municipales. De hecho, todos los puntos estaban relacionados con la falta de presupuestos para el 2023, y así, como si fueran pequeños dardos todos los grupos de la oposición se lo echaron en cara al PSOE. Y como el portavoz socialista apunta los arranques de los compañeros de corporación, al final tuvo que responder y confirmar que en unas semanas tendría listo un borrador de presupuesto, y en disposición de negociarlo.
«Veremos se hai marxe ao acordo», apuntilló. Y Jorquera (BNG), con tablas en la confrontación política, daba ya por hecho que el gobierno local prorrogaría las cuentas del 2022 por muchas reuniones que hubiera con los grupos. ¿O acaso no es eso una estrategia electoral en vísperas de unas elecciones municipales?
Rosa Gallego añadió que, si no había presupuestos, al menos se acordase un modificativo de crédito para que las entidades no quedasen sin asignaciones y pudiesen seguir ejecutándose proyectos. También se criticó, y mucho, el poco margen que se dio para analizar los asuntos del pleno. «Una falta de respeto», dijo Miguel Lorenzo. Y Avia Veira puntualizó que tuvieron una hora y 40 minutos para analizar la documentación, como el informe del interventor, «que non é pouca cousa», mientras que en el pleno ordinario de este mes se trataron temas de menos enjundia.
En el debate sobre las expropiaciones para el Nuevo Chuac, la alcaldesa tuvo que pedir al público presente que se abstuviese de gesticular o levantarse. Eran vecinos y miembros de la plataforma de afectados por el Novo Chuac a los que algunos concejales miraban cómplices y se dirigían sin reparos a la hora de defender sus posturas. Al final, Inés Rey, zanjó sin más preámbulos: «Feliz ano novo a todos, con moita saúde e teñan moito amor e forzas para o vindeiro ano».