La Ciudad Vieja de A Coruña: Cinco años de su peatonalización y sin rastro de revitalización
A CORUÑA CIUDAD
Vecinos y comerciantes dicen que aún entran coches y exigen medidas de dinamización
16 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.«Tenemos sensación de aislamiento y no tiene visos de mejorar», asegura Adolfo López, presidente de la asociación de comerciantes Aceca, cuando se cumplen cinco años de la peatonalización de la Ciudad Vieja, un cambio que iba a suponer el inicio de la revitalización del barrio, aunque «realmente no se ha hecho nada de lo que se propuso».
Se hicieron muchas mesas y reuniones para hablar del futuro de este casco histórico. Comerciantes y vecinos estuvieron a favor de la peatonalización como primer paso para iniciar un plan de revitalización comercial, social y económica, «el cual se ha hecho en otras ciudades gallegas, como Vigo», menciona. «Por aquí han pasado diferentes gobiernos municipales y cada día es más complicado hacer actividad comercial», sostiene López, que calcula que en estos cinco años de peatonalización «hay más o menos el mismo número de comercios, porque algunos abrieron y otros cerraron», lo que sí hay es un poco más de hostelería. «Pero vamos para abajo», asume resignado. «Esto se esta convirtiendo en una zona totalmente residencial, como Ciudad Jardín y A Zapateira», sostiene, al tiempo que tilda de «héroes» a los comerciantes que se atreven a abrir un negocio. «Lo que tira del comercio es la buena hostelería y la restauración», sostiene.
La Feira das Marabillas, la artesana y un nuevo mercado que esperan que salga adelante son algunos de los eventos que han propuesto los comerciantes para atraer gente y riqueza a la Ciudad Vieja. Aunque son iniciativas que suelen funcionar, pide que sean las Administraciones las que pongan en marcha un plan, «aunque sea a tres o cuatro años», que solvente esta situación. De hecho, tanto la Xunta como el Ayuntamiento se comprometieron a hacerlo. En febrero del 2020 iniciaron los trámites para poner en marcha el proyecto Rexurbe, que incluye la declaración de un área en la que no solo se rehabiliten edificios antiguos, sino que también se articulen medidas socioeconómicas y ambientales, con el fin de facilitar una recuperación integral de la zona. Sin embargo, en este mandato tampoco se llegó a desarrollar ninguna actuación, ni se conocieron propuestas para esta área Rexurbe.
Cuidar el turismo
El presidente de Aceca hace hincapié en cuidar aspectos turísticos. «Es una pena que un visitante se encuentre las iglesias cerradas: la Colegiata, la de Santiago y Dominicos, donde está la Virgen del Rosario, la patrona. Además, el palacio de Capitanía podría ser un sitio visitable, tiene unos jardines preciosos», considera López.
Esta consideración la comparte Leonardo Méndez, presidente de la Asociación de Vecinos de la Ciudad Vieja, que subraya que «el casco antiguo, históricamente, tiene mucho potencial» y se deben «potenciar cuestiones museísticas», tanto para turistas como para los coruñeses.
Respecto a la prohibición de la circulación del tráfico rodado, ambos coinciden en que, pese a que se instauró hace un lustro, sigue sin cumplirse. Consideran que los coches seguirán entrando hasta que el Ayuntamiento instale las cámaras anunciadas para vigilar la limitación. «Nos dicen que aún no han llegado por culpa de un tema de suministros», comenta Méndez, quien espera que lleguen «porque ahora hay un descontrol». «Entran vehículos no autorizados y para estacionar tenemos unas plazas para residentes, pero las ocupa la gente que no está autorizada. Esto provoca tensiones porque los vecinos llegan y no pueden aparcar», explica el presidente de la asociación, que pide mayor control policial para regular el aparcamiento.
También exige controlar las tarjetas de residente para autorizar automóviles. «Se empezó con 700 personas cuando se concedieron los permisos y ahora estamos en 1.800. Es imposible que aquí haya tanta gente, pero no se ha hecho una depuración de los listados. Hay personas que dejaron de vivir aquí y que lo siguen usando. Se nota especialmente los fines de semana y en verano», detalla Méndez, que reclama soluciones de estacionamiento para los trabajadores de la zona.
Precisamente, Adolfo López recuerda que habían hecho hace años un plan de modificación de los espacios de aparcamiento en el paseo marítimo desde el castillo de San Antón y hasta la zona de Pelamios. «Se quedaría en un cajón», apunta y manifiesta que no sabe cuántas plazas quedarán ahora con las obras de humanización que se están haciendo.