La calle de A Coruña donde todos quieren estar: «Los bajos llegan a costar hasta 10.000 euros al mes, pero a algunos negocios les compensa»
A CORUÑA CIUDAD
La inauguración de la tienda de moda Ese o Ese en la Casa Arambillet y la remodelación de Oysho confirman que la plaza de Lugo es terreno fértil para la moda, pero no demasiado para el comercio minorista o la hostelería
03 jul 2024 . Actualizado a las 17:06 h.No estuvo ni diez años en pie, pero le dio tiempo a convertirse en un símbolo de la nueva era de la plaza de Lugo. Asentado este enclave como la zona cero de las compras en A Coruña, el entorno del mercado municipal recibió en el 2013 la llegada de un Café Vecchio que acompañaría al local situado en la calle Real, antes de que cambiara de acera. Tras más de dos años sin dueño, el bajo de la Casa Arambillet, una de las joyas del modernismo herculino, vuelve a abrir al público gracias a la marca Ese o Ese, que desata pasiones entre esas chicas de la generación Z que huyen de las estridencias en favor de un menos es más donde la calidad es lo único importante.
La llegada de esta tienda a tal punto estratégico, sumado a la renovación del Oysho que hace esquina con la calle Betanzos, no hacen más que confirmar un secreto a voces: esta es la calle donde todo el mundo quiere estar. Pero a la que muy pocos tienen acceso.
En el portal Idealista ahora mismo hay un único local en alquiler en el perímetro que rodea al mercado. Cuesta 8.000 euros al mes y se trata de una tienda que tiene salida a tres calles y mide más de 300 metros cuadrados. Lejos de ser un precio desorbitado, según indica Álvaro Rodríguez, la horquilla habitual en la que se mueven los alquileres en esta zona está precisamente entre los 8.000 y los 10.000 euros. «Lo primero que hay que tener en cuenta, además del constante tráfico de gente que tiene la plaza de Lugo tanto entre semana como los sábados, es que estos locales son, en sí, muy buenos. La calle Real también es zona de mucho tránsito, pero los bajos son más pequeños y estrechos». El socio director de Engel & Völkers A Coruña, indica además que «tener cerca a Inditex te revaloriza, por eso desde que este gigante del retail abrió tiendas en este enclave, se trasladó el centro neurálgico del ocio coruñés».
El coste de la mensualidad en la plaza de Lugo es difícil que puedan permitírselo negocios locales o tiendas minoristas. Para algunos, la extinción de Vecchio era crónica de una muerte anunciada. Y pese a que resisten negocios de hostelería en esa misma acera de impares como la cervecería Plaza, para Rodríguez solo es rentable para excepciones como Siboney, «que siempre está hasta los topes» —este local está ubicado en la vecina calle Ferrol, otra de esas imponentes vías de fachada modernista—.
«Entre los negocios instalados en los 36 locales de la plaza Lugo destacan los espacios destinados a la moda, que representan más de la mitad del espacio total, un 58,33 %», destacaba hace un par de meses el primer Informe de Retail del año 2023 elaborado por las consultoras Gesvalt y aRetail. «Es el sector que realmente le saca beneficio a este emplazamiento», apunta Rodríguez. Entre la iglesia de Santa Lucía y la esquina de Oysho, cuya reapertura con un moderno lavado de cara se hace esperar, se hacen fuertes Scalpers, Carolina Herrera y, desde esta semana, Ese o Ese. «Pero en las calles adyacentes siguen grandes marcas de moda y algunas de las mejores joyerías de la ciudad», comenta el responsable en A Coruña de Engel & Völkers, que lanza un último dato para entender el caché de la zona: «A diferencia de lo que ocurre con otras zonas de la ciudad, hasta aquí llega gente desde los cuatro costados de la ciudad, y esto influye porque todo el mundo acaba ahí en algún momento».