Furor por vivir en edificios históricos con pisos que rozan el millón de euros

Patricia Hermida Torrente
Patricia Hermida FERROL / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Interior de un edificio rehabilitado por Ergo Construcciones en Ferrol.
Interior de un edificio rehabilitado por Ergo Construcciones en Ferrol. JOSE PARDO

Sube la demanda de rehabilitaciones: «A Coruña es el doble de cara que Ferrol, y en zonas como la plazas de Lugo o Pontevedra el triple »

29 jul 2024 . Actualizado a las 02:47 h.

¿Cómo resistirse a vivir entre vidrieras en Ferrol o asomado a las inmensas galerías de A Coruña? El sueño de cada vez más gallegos pasa por residir en un piso o incluso en una casa emblemática en pleno centro. El furor por el regreso a los cascos históricos se plasma en un ascenso de los precios, con pisos totalmente reformados en edificios con pedigrí que rozan el millón de euros. En la cotizadísima plaza de Lugo de A Coruña ya hay pisos antiguos o señoriales que se venden por 850.000 euros. En Santiago de Compostela se ha puesto a la venta incluso una casa singular en pleno casco histórico por 2,4 millones de euros (tres pisos, ático y dos locales comerciales). Muchas promotoras compran este tipo de edificios, los reforman y después ponen a la venta los pisos a título individual.

Así ocurrió en Ferrol, donde uno de los inmuebles más reconocidos de la plaza de España (el diseñado por Rodolfo Ucha Donate en 1958, hijo del mítico Ucha Piñeiro) estuvo en el mercado por algo más de un millón de euros. Finalmente el propietario decidió rehabilitar los exteriores y vender los pisos por separado. Como confirman desde la inmobiliaria Te Buscamos Casa, con sede A Coruña, «vendimos casi todos en un tiempo récord». Desde esta agencia, Sofía Montero recalca que «incluso llegaron compradores de fuera de Galicia, algunos querían reformar para alquilar o revender después».

Reforma de un piso de Ego en A Coruña.
Reforma de un piso de Ego en A Coruña. Ergo

Empresas como Ergo Construcciones se mueven entre A Coruña y Ferrol. Y constatan la diferencia de precios en las ventas. Según indica Álvaro Herrero, gerente e ingeniero de Ergo, «A Coruña está el doble de cara que Ferrol, e incluso hay zonas como las plazas de Lugo o Pontevedra el triple de caras». Por ejemplo, en ese bloque de la plaza de España los pisos se vendían entre 100.000 y 125.000 euros. Pero había que reformar el interior, lo que costaría mínimo otros 100.000. Si se vende a terceros, el precio puede subir en estos casos a 250.000 euros.

Colocación de módulos en un emblemático edificio de A Coruña.
Colocación de módulos en un emblemático edificio de A Coruña.

Un hito para ganar alturas en uno de los inmuebles coruñeses con más pedigrí y solera

Un hito en la rehabilitación se puede observar en el proyecto de ampliación de un histórico edificio coruñés de Cuatro Caminos (alzado hace ya 84 años). Con estructuras industrializadas, ganará dos plantas y cuatro viviendas. Participaron el Grupo Ares de Sada, Dousdevinte Arquitectura de A Coruña, y Emsamble de Narón: «Era la primera vez que se hacía algo así en Galicia».

Otro espacio de un edificio histórico rehabilitado por Ergo en la provincia de A Coruña.
Otro espacio de un edificio histórico rehabilitado por Ergo en la provincia de A Coruña. Ergo

A la demanda ayuda la creciente apuesta de inversores de fuera de Galicia por estos cascos históricos. En Medusa Properties, agencia de A Coruña que tiene también edificios enteros a la venta en Ferrol, recalcan que «incluso nos llegó gente de Holanda interesada en comprar inmuebles en esta ciudad».

Ergo Construcciones también tiene proyectos en villas históricas como Betanzos o Pontedeume, «que cuentan con cascos con encanto y mucho más baratos, son sitios con muchísima vida».

Álvaro Herrero, gerente e ingeniero industrial en Ergo.
Álvaro Herrero, gerente e ingeniero industrial en Ergo. JOSE PARDO

Álvaro Herrero, gerente e ingeniero industrial en Ergo: «Se conserva la estética tan bonita de las casas antiguas con todas las comodidades actuales»

La mejor carta de presentación de Ergo se encuentra en el edificio que alberga sus oficinas: la casa de los padres de Álvaro Herrero, un precioso ejemplar azul en la ferrolana plaza de Amboage. La empresa se dedica a soluciones constructivas con especialización en la rehabilitación.

—¿Crece la pasión por vivir en un edificio histórico?

—Cada vez más gente quiere vivir en el centro de la ciudad. Hay un hándicap muy importante de la falta de aparcamiento, pero cada vez más edificios históricos ya incluyen ese servicio y con una estética muy hermosa. Se conserva esa estética tan bonita de las casas antiguas pero con todas las comodidades actuales para vivir mucho mejor.

—¿Se busca el plus de los techos altos?

—Techos muy altos, puertas muy altas. Y con el apoyo de las administraciones, que piden mantener esos elementos con tanto encanto. Nosotros nos movemos entre A Coruña y Ferrol, también por Vigo y Rías Baixas. En A Coruña tenemos un proyecto en la plaza de Pontevedra y otro en la Ciudad Vieja. En Ferrol trabajamos por el dieciochesco barrio de A Magdalena. Pero también estamos por Ferrol Vello, donde acabamos de arreglar un edificio con finca que queda como un chalé en el centro. También tocamos Betanzos y Pontedeume.

—¿El cliente persigue esas casas con encanto?

—Los edificios del siglo XVIII o XIX tienen ese encanto de las galerías. Nosotros mantenemos los muros de piedra originales y rehacemos la estructura de madera, todo eso aporta comodidad y bienestar.

—¿Y qué precios se ven?

—Depende de las ciudades. El centro de Ferrol tiene buenas oportunidades, como Betanzos y Pontedeume. A Coruña es más cara, la Ciudad Vieja no tanto, pero las plazas de Pontevedra o Lugo tienen edificios antiguos de grandísimo valor económico.