
Sanidade lanza recomendaciones de cómo actuar ante su presencia en los arenales
27 ago 2024 . Actualizado a las 11:52 h.Dos medusas azules sobre un fondo blanco es la bandera que ondeó el lunes en las playas coruñesas para alertar de su presencia en los arenales. Se coloca en los mástiles junto al resto de banderas, que informan del estado del mar y de los reconocimientos que tiene el arenal. Este martes ya no se utilizó, porque no se detectó la llegada de más ejemplares a los arenales, aunque continúa la búsqueda por parte de los técnicos municipales.

Coincidiendo con la llegada de numerosos ejemplares de carabelas portuguesas en la costa del área, la Consellería de Sanidade ha publicado recomendaciones de cómo actuar ante la llegada de medusas. La Dirección Xeral de Saúde Pública informa del protocolo a seguir en caso de picadura de medusa en las zonas de baño. En primer lugar, la persona que haya sido picada por una medusa deberá salir del agua y eliminar los posibles restos de tentáculos que tenga en el cuerpo, explica. Para realizar esta extracción, deberá evitar el contacto directo con las manos, utilizando pinzas o guantes, o en su ausencia, con el borde de un objeto rígido y plano. También indican que es muy importante que en ningún momento se rasque o frote la zona afectada, ni que se utilicen toallas o arena para limpiar la herida, ya que esta presión podría aumentar la liberación de veneno. El segundo paso a seguir es lavar la zona afectada con agua de mar limpia, comprobando previamente que esa agua no contenga fragmentos de tentáculos. En este caso, precisan que nunca se debe lavar la zona afectada con agua dulce, ya que el cambio de salinidad provoca una mayor liberación de veneno. Tampoco se debe utilizar amoníaco, vinagre o orina.
A continuación, se deberá aplicar frío sobre la zona de la picadura mediante una bolsa de plástico con hielo, durante un espacio de tiempo de 15 minutos. De este modo, se evita que el veneno pase al torrente sanguíneo. El cuarto y último paso será desinfectar la herida con tintura de yodo para evitar posibles infecciones. Así, se cuidará la herida hasta que cicatrice y se intentará evitar otra posible picadura durante el resto del verano, pues sus consecuencias pueden ser mucho peores al quedar el cuerpo sensibilizado al veneno. Cabe recordar que, en el caso de contar con servicio de socorrismo en la playa, se deberá acudir al mismo y que, en caso de padecer síntomas generales como náuseas, vómitos, mareos, calambres musculares, dolor de cabeza, o dificultad para respirar, se deberá acudir al centro sanitario más cercano o llamar al 112.