
Madera y Carbón es el nuevo nombre del restaurante de la recta de Bastiagueiro en el que apuestan por el churrasco y el pollo a la brasa, un concepto muy diferente al de las últimas décadas, «y por eso decidimos cambiarle el nombre», dice el propietario, Iago Díaz
16 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Pasó por varias manos. Los distintos dueños fueron apostando por estilos de cocina diferentes. Hubo algunas temporadas que estuvo cerrado. Pero en la recta de Bastiagueiro, durante 74 años, siempre existió un restaurante Casa Paquita. Pero ahora no, desde esta semana el establecimiento se llama Madera y Carbón. «Costó tomar la decisión de eliminar lo de Paquita, pero pensamos que este es un proyecto nuevo que nada tiene que ver con lo que tradicionalmente hubo aquí. Es una parrillada en la que el churrasco, para tomar aquí o para llevar, es el protagonista. Es un concepto más fresco, adaptado a todos los públicos y bolsillos con tiques medios de 20 a 25 euros», explica Iago Díaz, propietario del negocio. Me habla de una de las especialidades, el pollo a la brasa hecho con carbón y que acompaña de patatas y ensalada mixta por 15 euros. «Cualquier cosa de la carta la puedes pedir para llevar. Hay croquetas, callos, langostinos al ajillo, bacalao, cachopo y, por supuesto, churrasco de ternera o cerdo, o mixto con pollo a un precio razonable», destaca Iago, que lleva mucho tiempo vinculado a la hostelería y que formó parte del último proyecto de Casa Paquita, aunque ahora en Madera y Carbón va en solitario. Bastiagueiro se queda sin Casa Paquita después de 74 años, pero no sin restaurante. Un nuevo concepto en el que los pescados seleccionados y los arroces o platos más elaborados dejan paso a las brasas.