De zona catastrófica a templo del buen comer: así se ha convertido Pazo do Río en el restaurante mejor valorado de Oleiros
OLEIROS
El lugar donde ocurrió la gran tragedia aérea de Galicia, el accidente de avión de Montrove, es hoy el segundo local con mejores reseñas de TripAdvisor en A Coruña
01 nov 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Donde ahora se celebran bodas, eventos y catas culturales, hace cincuenta años reinó la desolación. El 13 de agosto de 1973 el vuelo 118 de Aviaco, que viajaba de Madrid a Alvedro, se estrelló en Montrove, causando la muerte de 85 personas (79 pasajeros y seis tripulantes). En la actualidad, de esta zona cero queda solo el recuerdo, pues Pazo do Río ha convertido este espacio en un lugar de peregrinaje para los amantes del buen comer. Tanto que en el ránking de TripAdvisor se encuentra como el segundo mejor valorado de A Coruña, solo por detrás de Terreo.
Este edificio del siglo XVI, que cuenta con una superficie de más de 10.000 metros cuadrados, se reconvirtió hace casi veinte años en un complejo hotelero con apartamentos independientes gracias a la familia Canabal. Lucía, segunda generación, centra ahora los tiros, sobre todo, en la parte de restauración, donde el pazo se ha labrado un nombre propio. «Estamos muy contentos porque nuestros clientes nos dan el mejor feedback posible, Ofrecemos producto gallego en elaboraciones refinadas, con mesas cuidadas e ingredientes locales». Entre los grandes éxitos destacan la tortilla de Betanzos con croca y, en esta temporada, los platos con caza. «Aunque donde hay unanimidad de opiniones a la hora de valorar positivamente una receta es en el postre: la torrija del pazo es infalible», apunta Canabal.
Las vistas a la ría de O Burgo son inigualables, y un reclamo para muchos novios, que desean celebrar aquí su boda. El carácter polivalente de este espacio hace que sirva para una comida de domingo o un evento de alto copete. «Como tenemos habitaciones y apartamentos es muy cómodo para parejas extranjeras que se casan aquí, que cada vez tenemos más; ayuda también que tenemos un equipo bilingüe, que no abunda».
Pazo do Río exploró nuevas vías de negocio con sus célebres catas literarias, donde la idea es disfrutar de la lectura con un buen vino, y fue un paso más allá, abriéndose a las cenas literarias, unas jornadas gastroculturales que siguen aunando el poder de un libro con un menú de infarto.