
La rúa Linares Rivas, el principal eje mercantil, cuenta solo con dos bajos en alquiler y uno a la venta
25 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La rúa Linares Rivas, equiparable en versión sadense a la calle Real coruñesa, es un buen medidor de la reactivación del comercio local en el municipio. En su entorno, en el plazo de un mes, se abren cuatro nuevos locales. Obviando los inmuebles clausurados, actualmente solo hay en esta vía copada por comerciantes de todo tipo tres bajos a la espera de inquilinos, dos en régimen de alquiler y otro en compra.
En este nuevo bum comercial la primera tienda en abrir, el día 9 y en la rúa Oleiros, una perpendicular a Linares Rivas, fue Y Alma. Al frente de ella están Silvia Seijo y Geli Rama, que destacan la buena acogida que ha tenido su tienda de moda. «Hay mercado para este tipo de negocio y nos gusta», explica Seijo, que asegura que tiraron de los ahorros para embarcarse en el proyecto, tras trabajar en otros sectores, ya que ella es administrativa y su compañera trabajaba en una panadería.
El miércoles por la tarde también abrió Meigallo Complementos, enfrente de la Capela de San Roque. Lucía Domínguez, que ya trabajaba para esta firma que cuenta con una veintena de establecimientos, e Inmaculada Vicente atienden una tienda por la que ayer pasaron muchos clientes porque, aseguran, «había expectación» porque diversos trámites retrasaron la apertura tres meses. «Sada es una zona muy turística y la empresa apuesta por zonas de costa», explica Domínguez, que destaca la aceptación.
El bajo contiguo está siendo acondicionado para abrir una tienda Phone House. «Temos outra en Pontedeume, e por proximidade e polo movemento de xente apostamos por esta zona», reconocía ayer Fernando López, que trabajaba en la remodelación del local, al que no pone fecha de apertura, pero sentencia que será «en breve». La propuesta de abrir las tiendas reconoce que fue de su mujer, María Castro Fraga, que llevaba años trabajando en telefonía, y que él se sumó tras rechazar un contrato fijo que le obligaba a viajar mucho. «Estaremos os dous e colleremos un empregado», explica, sobre una opción que va más allá del autoempleo.
Traslado
Otro espacio que se está remodelando, en Linares Rivas 39, es el que albergará Pescadería Sada, un negocio que atienden Pilar Varela, Susana Gómez y Guadalupe Carro, que se trasladará desde la Avenida do Porto. «Compramos o baixo hai un ano, é bastante investimento porque vai todo novo, levamos seis meses de espera polo permiso de obra e abriremos a primeiros de xuño», explica Varela, que comenta que contarán con un trabajador para atender repartos. «Levamos moito tempo e imos ter a clientela de sempre, pero como o novo local está máis céntrico facilítalle á xente vir a pé, sobre todo cando hai mal tempo», explica mientras los obreros continúan apurando la obra.
«O Concello ten atractivo para quen queira montar negocio»
«O Concello de Sada ten atractivo para un comerciante ou empresario que queira montar un negocio porque o emplazamento da zona é bo, estamos ben comunicados, preto de núcleos grandes como A Coruña ou Ferrol para facer trámites administrativos, e ao estar na costa temos unha serie de recursos importantes», reconoce el concejal de Promoción Económica, el nacionalista Liss Becerra. «Estamos vendo, por tendas que abriron os dous últimos anos, que veñen comerciantes de fóra da comarca das Mariñas e incluso da provincia», una cuestión que vincula «a que a todos os niveis, non só o político, que se faga moita promoción de Sada acaba calando». Becerra apunta, también, el esfuerzo municipal que se realiza en todas las áreas para publicitar los recursos del municipio y «o feito de ir predicando a imaxe de Sada alá onde vas, de forma continua e por todas as persoas que formamos parte da vila, acaba dando resultados», dice.
El concejal, que cree que los retrasos en la tramitación de licencias pueden ser derivados de los ajustes exigidos en algunos proyectos, considera que la reapertura del hotel de Sada «anima tamén un pouco á xente a dar o paso, porque hai unhas expectativas de visitantes maiores». «As persoas que deciden abrir en Sada é porque ven que hai cousas que non están cubertas e lánzanse, e eu pola experiencia que teño, como terceira xeración de comerciantes, podo garantir a grande cantidade de xente que pasa polo Concello, incluso nos anos malos, que fai que as portas poidan estar abertas aínda que non sexa doado porque o tema dos autónomos é complexo», apunta.