La paradoja de tener una casa en Ciudad Jardín: de la milla de oro de A Coruña a la milla de cobre
VIVIR A CORUÑA
Expertos inmobiliarios mantienen que aunque todavía es «una zona exclusiva», la mayoría de chalés tardan dos años en venderse y solo lo hacen cuando los precios se desploman
31 ene 2024 . Actualizado a las 13:46 h.El caso de Villa Felisa es paradigmático. La que es considerada una de las joyas de la Corona de Ciudad Jardín no encuentra dueño desde hace casi un lustro, y eso que a comienzos del 2020 su precio de salida rondaba los tres millones de euros y ahora se puede adquirir por menos de dos millones. La reveladora caída del coste no ha hecho que nadie se decida por mudarse a un chalé único en A Coruña, y esto solo se entiende si se abre el foco y se radiografía la situación del resto de inmuebles que están a la venta en la zona, que podría decirse que ha pasado de ser la milla de oro de la ciudad a la milla de cobre.
Basta con entrar en el portal Idealista para ver por dónde van los tiros respecto al desembolso que supone vivir en unas casas que suelen tener más de cinco habitaciones y unos 400 metros cuadrados. Hay proyectos que casi alcanzan los dos millones y medio de euros, mientras la mayoría se quedan en 1,3 millones. Desde luego, son pocas las casas que se liquidan por seis dígitos. Esta realidad choca frontalmente con la visión que tienen los expertos inmobiliarios de la ciudad, que piensan que la mayoría de chalés se intentan vender por unas cifras que no tienen demanda, y así pasa el tiempo y siguen vacíos.
La agencia especializada en propiedades de lujo Engel & Volkers ha vendido unos ocho o nueve chalés en Ciudad Jardín en ocho años. Se trata de la compañía que más bienes posee en este barrio, y con su conocimiento de causa, el socio director de la sede de A Coruña, Álvaro Rodríguez, opina que «se trata de un parqué de chalés antiguos que siguen generando interés, pero que tienen en su virtud su principal problema: son casas enormes cuya reforma sale por más de 500.000 euros; si los precios ya superan el millón de euros, la demanda evidentemente cae». Generalizando, Rodríguez cree que la mayoría de estas viviendas deberían rondar los 900.000 euros, y suelen alcanzar este valor —si lo hacen— al cabo de un par de años, tras acabar los propietarios rindiéndose a la evidencia.
Coinciden el socio director de Engel & Volkers en A Coruña y Antonio Correa, de BackHome, en un aspecto fundamental para entender la casuística de Ciudad Jardín. «La mayoría de estas casas pertenecen a familias acaudaladas y numerosas que no se ponen de acuerdo a la hora de fijar un precio. 'Yo con 150.000 me conformo', dice de repente un sobrino; y no se da cuenta de que si cada uno se lleva ese dinero el chalé hay que ponerlo a cinco millones y no se vende», desarrolla Rodríguez. Correa, por su parte, añade que aunque estos inmuebles generan «muchos problemas familiares», en cuanto están «en precio» se venden. Para ello, son pocos los chalés que, según él, «pueden costar más de un millón de euros».
Respecto al perfil de comprador, hay cierto consenso. Correa menciona a parejas que trabajan en multinacionales asentadas en A Coruña con buenas posiciones laborales, porque conoce estos casos. Rodríguez, por su parte, también habla de gente que mejora en su trabajo y que, cuando supera los 50 años, da el salto a este tipo de viviendas. «Desde luego, no son extranjeros. Los pocos que se interesan por una segunda residencia aquí se quedan con Oleiros», añade.
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Víctor López, copropietario de la inmobiliaria Tilit Realty, reconoce que le gustaría tener un chalé en Ciudad Jardín en su cartera de viviendas disponibles porque «no lo neguemos, siempre da caché y un plus de exclusividad». Sin embargo, reconoce que con el miedo que le tiene la gente a la reforma de pisos, por la subida generalizada del precio de los materiales, esta zona tiene las de perder. «Muchas viviendas están muy deterioradas y cuando uno hace cierta inversión quiere que su casa esté absolutamente a su gusto», justifica. Por eso, piensa que manejando precios similares al Parrote y la zona de la plaza de Lugo, los que quieren vivir en el centro de la ciudad, y pueden gastarse tal cantidad de dinero, prefieren estas zonas.