De comida con las once focas de A Coruña: «Es de verdad que son afables, las que tenemos aquí son encantadoras»
VIVIR A CORUÑA
La experiencia Aventuras coas focas ha vuelto este mes de noviembre al Aquarium Finisterrae, con 16 actividades previstas hasta final de año
17 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Hansi, Altair y Fermín, machos; Petra, Paula, Lara, Vega, Deneb, Spica, Lucía y Sabela, hembras, son las once focas que viven en el Aquarium Finisterrae de A Coruña. Una pequeña población que hace las delicias de los más pequeños durante la actividad Aventuras coas focas, que ha comenzado su nueva temporada este mes de noviembre con éxito: las plazas hasta final de año ya están completas.
Francisco Armesto, director técnico del Aquarium Finisterrae, tiene claro que, junto con la visita a Gastón, el tiburón toro del Nautilus, el espacio de las focas es el que más miradas recibe tanto de niños como adultos. Y la razón puede estar en que las focas son animales cercanos. «En general, las focas tienen un carácter afable, aunque también hay algunas más ariscas. Pero las que tenemos aquí son encantadoras», afirma.
Eso no significa que dejen de ser animales, y es algo que se explica en la experiencia Aventuras coas focas, pensada para niños y niñas de más de siete años. «En efecto, la gente se sorprende de que son muy afables, pero podrían no serlo. A los niños que vienen les contamos que son carnívoras y que tienen una dentadura como la de un perro y las garras de un oso, entonces, podrían hacer daño», explica.
Para conocer a estas focas de cerca, hay que reservar plaza. El cupo hasta final de año ya está completo: «A los cinco minutos de que abriésemos la inscripción ya estaba completo», cuenta el director del centro. En total, son 168 personas las que van a poder participar en una jornada que empieza a las 11:00 horas con una explicación sobre estos mamíferos marinos. A continuación, los propios niños y niñas preparan su comida, a base de sardinas o arenques, y termina con la alimentación de las focas por parte de los adiestradores, pero a menos de un metro de los participantes en la jornada.
«Esta actividad te permite estar muy cerca de las focas. Entonces, se les explican unas normas de comportamiento, lo que pueden hacer o no en la plataforma, porque no son animales salvajes, pero tampoco son domésticos. Las focas solo están habituadas a los adiestradores», afirma Armesto. A comienzos de año se abrirá el segundo plazo y luego un tercero. Aventura coas focas tiene una duración similar al horario escolar.
Esta experiencia no sería posible sin el trabajo de todo el equipo humano que se encarga del cuidado de esta pequeña familia. Su atención comienza a las nueve de la mañana, cuando el centro todavía no está abierto al público. Es el momento que se aprovecha para hacer exploraciones más a fondo, por si tienen algún corte o se les administra algún tipo de tratamiento por si tienen conjuntivitis o algún problema dental. «Aquí se les está atendiendo continuamente. Están muy mimadas, controladas», afirma el director del Aquarium.
En esta primera toma de contacto, se les da de desayunar y, como las personas, volverán a comer en dos ocasiones más. «Diariamente, los machos comen en torno a los tres kilos y medio, y las hembras comen como mínimo dos kilos doscientos. El pescado es congelado porque tenemos que asegurar que no haya ningún tipo de contaminación, como parásitos como el anisakis. Cada animal tiene su nevera», cuenta Armesto sobre su alimentación.
Este grupo de focas del Aquarium se empezó a arma al poco de la inauguración del centro. Las primeras llegaron en el año 2000 y se reprodujeron en dos ocasiones. Sin embargo, desde hace más de quince años no tienen crías. «Es una población de focas adultas», recuerda Francisco Armesto, pero que hace las delicias de los visitantes del Aquarium.